El presidente Andrés Manuel López Obrador y la presidenta electa Claudia Sheinbaum concluyeron este domingo su recorrido por el país, el cual comenzó tras la victoria de Morena en las elecciones del 2 de junio.
El cierre de la gira tuvo lugar en la Explanada de los Héroes de Monterrey, Nuevo León, donde ambos coincidieron en que se trata de una transición de gobierno «histórica».
«Es una transición entre el gobierno del Presidente, que está cerrando un ciclo, y la nueva etapa de la Cuarta Transformación que comenzará a partir del 1 de octubre», resaltó Claudia Sheinbaum.
La próxima mandataria de México expresó que sus viajes junto a López Obrador han sido emotivos y significativos, ya que el actual presidente representa un cambio profundo en la manera de gobernar.
Adelantó, además, que seguirá participando en las inauguraciones de obras a las que sea invitada por el presidente. López Obrador subrayó que su gira junto a Sheinbaum es un evento que “no se había visto en muchos años”, ya que en el pasado, el presidente en funciones y el electo no solían tener encuentros ni coordinarse.
«Ahora, por primera vez, y esto también es un aporte, es algo inédito. Estamos realizando este cambio en armonía, con la presidenta electa y quien les habla, aún presidente constitucional», añadió.
López Obrador destacó a Sheinbaum Pardo como una “giganta”, y recordó que se le deberá llamar «presidenta» y no «presidente».
Durante su último día de gira, el presidente presumió que durante su administración, más de 5 millones de mexicanos han salido de la pobreza y que ha sido una buena época para todos.
«Ustedes saben que les ha ido muy bien a comerciantes, empresarios y banqueros. Han tenido utilidades récord, los bancos obtuvieron 270 mil millones de pesos de utilidad el año pasado», afirmó.
