Cuando los amigos se reúnen y discuten sobre un tema específico, a menudo se sorprenden al notar que, tras revisar sus redes sociales, comienzan a ver anuncios relacionados con esa conversación privada. Esta situación recurrente ha generado especulaciones sobre la posibilidad de que los teléfonos móviles estén escuchando las conversaciones para personalizar la publicidad. Sin embargo, este fenómeno no es motivo de alarma.
Expertos de Kaspersky han desmentido esta teoría y ofrecen recomendaciones para mejorar la privacidad de quienes se sientan incómodos con esta situación.
La percepción de que los teléfonos móviles están espiando conversaciones para ofrecer publicidad personalizada se basa en dos factores principales: el seguimiento de los hábitos digitales y el intercambio de preferencias entre dispositivos cercanos.
El seguimiento de hábitos en línea ocurre continuamente mientras el usuario está conectado a Internet. Esto incluye los sitios web que visita, los productos que explora y compra, las búsquedas que realiza, los contenidos que le gustan en redes sociales e incluso la ubicación registrada por el GPS de su dispositivo. Esta información permite a las empresas conocer los intereses y preferencias de los internautas y ofrecerles recomendaciones personalizadas. Por ejemplo, si buscas rutas de senderismo, es probable que eventualmente veas anuncios de viajes a lugares donde se practique esta actividad, aunque no hayas buscado específicamente ese destino.
El verdadero factor detrás del mito de que los móviles espían conversaciones es la capacidad de compartir preferencias entre dispositivos cercanos. Los smartphones tienen una función que permite intercambiar información sobre los hábitos de compra entre ellos. Así como las personas comparten información durante las conversaciones, los dispositivos también lo hacen para mejorar la personalización de las ofertas en línea.
Cabe destacar que este intercambio no se asocia al propietario del teléfono móvil, sino al número de registro de Internet (IP) del dispositivo. Esto significa que no se «filtran» datos personales identificables. En realidad, se transmiten «metadatos» que no permiten identificar a las personas.
Aunque buscamos o consumimos contenidos online a diario, este intercambio entre dispositivos ocurre de manera constante. Sin embargo, no notamos este proceso con temas generales, ya que creemos que es publicidad masiva. La percepción de espionaje surge cuando hablamos de un tema específico, como un destino de viaje poco común o un producto particular, y luego vemos anuncios relacionados. Estos casos específicos son los que generan la impresión de que el móvil ha escuchado la conversación, explica Leandro Cuozzo, analista de seguridad de Kaspersky.
El experto recomienda prestar atención a las aplicaciones que rastrean activamente el comportamiento de navegación o interacción. Para ello, revisa los permisos de cada aplicación al instalarla y desactiva las funciones que consideres invasivas. Si deseas limitar el intercambio de datos personales, puedes ajustar las preferencias de tu móvil para evitar que las aplicaciones accedan y compartan datos sobre tu historial de navegación o hábitos de consumo.
Recomendaciones para mejorar tu privacidad online:
- Usa el modo incógnito: Si prefieres evitar la configuración completa o solo necesitas ocultar el historial de ciertos sitios web, utiliza el modo incógnito. Este modo impide que el navegador almacene información sobre las páginas visitadas, cookies, contraseñas, entre otros. Además, permite seguir usando pestañas normales sin interferencias y no borra la información ya guardada por el navegador.
- Bloquea rastreadores web: Utiliza programas y extensiones especializadas, como el bloqueador de anuncios AdBlock Plus, que también impide que las redes sociales rastreen tu actividad (debes activar esta función en la configuración). También puedes consultar la lista de rastreadores bloqueados por defecto. Los productos de Kaspersky ya ofrecen protección contra el rastreo web.
- Utiliza una VPN: Una red privada virtual (VPN) es una herramienta esencial para los usuarios que se conectan a diferentes redes Wi-Fi. Algunos servicios son gratuitos y otros de pago, pero a veces es mejor invertir en ciberseguridad que arriesgarse a perder información valiosa.
Con información de Kaspersky.