La esgrimista egipcia Nada Hafez sorprendió al mundo al revelar que compitió embarazada de siete meses en los recientes Juegos de París. En un mensaje en sus redes sociales, la joven de 26 años anunció que había participado en la competencia mientras esperaba un hijo, logrando avanzar hasta los octavos de final.
Hafez, actualmente número 26 del mundo, destacó en sus terceros Juegos Olímpicos, habiendo competido previamente en Río 2016 y Tokio 2020. En París, la esgrimista alcanzó los octavos de final, superando en la primera ronda a la estadounidense Elizabeth Tartakovsky antes de ser eliminada por la surcoreana Hayoung Jeon.
La revelación de Hafez, quien practica la disciplina de sable, un arma que requiere gran velocidad y reflejos, ha generado una ola de apoyo en las redes sociales. Su publicación en Instagram, donde anunció su hazaña, superó los 25 mil ‘Me gusta’, con numerosos mensajes de admiración y felicitaciones por su desempeño.
Sin embargo, Hafez también ha enfrentado comentarios sexistas que critican su decisión de competir embarazada, insinuando que esto podría haber afectado su rendimiento y la representación de su país. A pesar de las críticas, la esgrimista expresó su orgullo por haber alcanzado la ronda de octavos de final y continuar su carrera deportiva mientras espera a su hijo.
La historia de Nada Hafez es un testimonio de la determinación y fortaleza de las atletas que continúan rompiendo barreras y desafiando estereotipos, demostrando que el deporte y la maternidad no son mutuamente excluyentes.