La organización civil Cooperación Comunitaria alertó que el agua de pozo en las comunidades rurales de Acapulco, específicamente en Apalani, Cantón y Cruces de Cacahuatepec, no es apta para el consumo humano. Esta advertencia se basó en estudios de laboratorio realizados a muestras de agua recolectadas recientemente.
Durante una asamblea del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la Presa La Parota (Cecop), Azucena Mastache, integrante de Cooperación Comunitaria, informó a representantes de más de veinte localidades de Cacahuatepec sobre los resultados preocupantes. Las pruebas revelaron la presencia de nitratos, urea y coliformes fecales en niveles superiores a los permitidos, así como turbidez en las cinco fuentes de agua analizadas.
En el foso general de El Cantón, se detectaron heces fecales. En Apalani, se tomaron muestras del foso y del arroyo donde las mujeres lavan ropa y se bañan, encontrándose bichos, sustancias activas, sólidos disueltos, sales, metales y coliformes fecales. Mastache advirtió que el agua del arroyo no es apta para beber debido a la contaminación por jabones y desechos.
En Cruces de Cacahuatepec, uno de los pozos mostró niveles elevados de urea, probablemente debido al uso de agroquímicos y fertilizantes, además de coliformes fecales.
Isadora Hastings García, también representante de Cooperación Comunitaria, explicó que las muestras fueron tomadas el pasado 9 de junio. Hastings García subrayó que los habitantes de la zona obtienen agua de pozos subterráneos, pozos cercanos al río Papagayo y, en algunas comunidades, a través de una red de bombeo, aunque no todas las comunidades tienen acceso.
Hastings García destacó la falta de saneamiento como el problema principal, indicando que no hay baños adecuados y que las heces y la orina se filtran en el suelo, contaminando el agua. Tras el impacto del huracán Otis, la organización ha priorizado el agua y el saneamiento como una línea de acción, proponiendo la construcción de baños secos y el uso de biofiltros para limpiar el agua doméstica.
El vocero del Cecop, Marco Antonio Suástegui Muñoz, enfatizó que el estado del agua es una llamada de atención para las autoridades de salud estatales y federales. Suástegui Muñoz advirtió sobre el riesgo de enfermedades graves, incluido el cáncer, derivadas del consumo de agua contaminada, y destacó que el acceso a agua potable es un derecho humano universal.
Muestras adicionales fueron tomadas en cinco puntos del río Papagayo, cuyos resultados se esperan en los próximos días. Suástegui Muñoz alertó que incluso el agua enviada a Acapulco podría estar en riesgo, haciendo un llamado urgente a las autoridades para tomar medidas inmediatas y emitir una alerta sanitaria.
