El huracán Otis dejó estragos en el estado de Guerrero, afectando a miles de familias y escuelas. A más de una semana del impacto del huracán, muchas niñas y niños aún no han podido regresar a clases y sus hogares han quedado destruidos.
Sin escuelas deja Otis en Guerrero
El equipo humanitario de Save the Children visitó los dos municipios declarados como zona de desastre natural, Acapulco y Coyuca de Benítez, en donde pudo atestiguar el nivel de daños en casas, escuelas, así como las necesidades de familias que, a más de una semana del impacto del huracán, se encontraban sin haber recibido agua y comida.
Muchas familias lo han perdido todo, desde alimentos, ropa, muebles, hasta útiles escolares y juguetes. En Coyuca, por ejemplo, las casas fueron arrasadas por la corriente del río que creció a raíz de las fuertes lluvias provocadas por Otis. Las calles aún están llenas de escombros, las casas que permanecen de pie se encuentran repletas de lodo, árboles caídos y animales muertos, condiciones que representan un foco de infección para la población, particularmente para niñas y niños.
Completamente destruidas
Las escuelas que pudo visitar la organización se encuentran completamente destruidas. Los techos de lámina desaparecieron, el inmobiliario se destruyó, las ventanas se rompieron y restos de objetos y árboles se encuentran esparcidos alrededor, haciendo imposible que los planteles puedan reabrir para reanudar las clases.
La situación es verdaderamente crítica y se requieren esfuerzos en conjunto para lograr que las comunidades se recuperen lo más pronto posible. Save the Children mantendrá presencia en las zonas afectadas apoyando con acciones enfocadas a la protección de la niñez, entrega de kits de higiene y saneamiento, recuperación de materiales para vivienda y escuelas y provisión de kits de alimentos.
Todas las personas pueden aportar sus donativos a través de la plataforma emergenciahumanitaria.mx. No hay cantidad pequeña ante la necesidad tan apremiante.
Por: Patricio Álvarez
