Un juez federal de Estados Unidos ha ordenado hoy que Steve Bannon, asesor del expresidente Donald Trump, ingrese a prisión el próximo 1 de julio para cumplir condena por desacato al Congreso. Bannon fue condenado en octubre de 2022 a una pena de cuatro meses de cárcel tras haberse negado a comparecer ante el comité que investigaba el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, mientras se acreditaba la victoria de Joe Biden sobre Trump en las elecciones presidenciales de 2020.
El asesor ultraderechista, de 70 años, perteneciente al círculo cercano de Donald Trump, afrontó el juicio por negarse a comparecer ante el comité de investigación. Caso semejante al de Peter Navarro, otro exasesor del expresidente, sentenciado también a cuatro meses de cárcel cuya condena empezó a cumplir en marzo pasado al entrar en prisión.
Bannon apeló la sentencia, pero un tribunal federal de apelaciones del Distrito de Columbia certificó el 10 de mayo pasado su condena. El comité que investigó el asalto al Capitolio tenía interés especial en la declaración del ultraderechista debido al posible conocimiento previo del ataque que hubiera podido tener. Durante el asalto se produjeron 5 muertos y 140 policías heridos.
La defensa pedirá al tribunal que reconsidere el fallo. David Shoen, abogado de Bannon, afirmó que en caso de que su cliente sea enviado a la cárcel, sufrirá un “daño irreparable” porque cumplirá la sentencia antes de que se resuelvan las apelaciones.
Al recibir la sentencia, Bannon ha declarado: “Se trata de una cosa: acabar con el movimiento MAGA (Make America Great Again), con los conservadores de base, con el presidente Trump”. Y ha añadido: “No se ha construido una prisión o una cárcel que alguna vez me haga callar… Vamos a ganar esto. Vamos a ganar en la Corte Suprema y, lo que es más importante, vamos a ganar el 5 de noviembre de manera aplastante”.
Este no es el único problema legal de Bannon. También está acusado de malversar dinero que se destinó a un grupo a favor del muro fronterizo que entonces apoyaba al expresidente. Este segundo juicio está programado para finales de año a celebrarse en el mismo tribunal de Manhattan que recientemente condenó a Donald Trump por falsificar registros para encubrir un escándalo sexual que puso en riesgo su candidatura presidencial en 2016.
