La Cruz Roja Mexicana ha desplegado un esfuerzo crucial para brindar asistencia humanitaria a la población afectada por el reciente paso del huracán Otis en Acapulco. En un comunicado oficial, se informó que un contingente de 300 voluntarios arribó al puerto con 75 toneladas de ayuda humanitaria para distribuir en la Delegación de Diamante y áreas circundantes. Adicionalmente, se espera la llegada de cuatro camiones adicionales cargados con 225 toneladas de alimentos el día de hoy, con el objetivo de intensificar las labores de socorro.
En paralelo, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha iniciado una serie de medidas preventivas para garantizar la calidad sanitaria del agua para el consumo humano. Las brigadas de emergencia sanitaria del organismo están supervisando la potabilización del agua mediante la distribución y monitoreo de cloro residual e hipoclorito de calcio en las fuentes de abastecimiento. Asimismo, se está llevando a cabo la distribución de plata coloidal para la desinfección del agua y alimentos crudos, con instrucciones precisas sobre su uso adecuado.
En apoyo a estas iniciativas, el director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), Pedro Zenteno Santaella, anunció la instalación de un hospital móvil en Acapulco. El nosocomio móvil, que consta de dos domos con capacidad para 80 camas, ha sido diseñado para brindar atención médica oportuna a la población afectada durante esta crisis.
Por: Ingrid Castillo
