La tarde del 16 de septiembre falleció el exgobernador de Tlaxcala que fue muy polémico durante se mandato, del 1981 a 1987 y se le atribuye el dicho «a los tlaxcaltecas se le gobierna con saliva y pulque», frase que fue sacada de contexto en aquellos años por la prensa local.
El político fue muy querido en su estado ya que contribuyo en gran medida para lograr el desarrollo del estado.
También se le recuerda, porque gracias a un regalo personal la actual casa de Tlaxcala fue donada por él para el gobierno del estado.
Una de las últimas apariciones públicas fue la donación que el Gobierno del Estado hizo al Instituto Nacional de Antropología e Historia del predio que aloja al Museo de Sitio de la Zona Arqueológica de Zultépec-Tecoaque, en Calpulalpan, en febrero pasado.
También es recordado por haber sido el último esposo de la famosa actriz, Silvia Pinal y por su afición a la fiesta brava.