El verdadero contracultural

Fecha:

José Agustín fumando un cigarrillo con mirada profunda

El gran José Agustín falleció este martes 16 de enero, fue guionista, escritor de teatro, literato, novelista, productor y director de cine y televisión, entre muchas otras acciones que desempeñó como verdadero exponente de la contracultura en México.

Una vez más ante el fallecimiento de un gran escritor de onda y rockero,  hago un texto no para hacer un recorrido de la obra del autor, sino para expresar mi historia con sus libros e ideas que marcaron un antes y después en mi juventud. 

Con José Agustín entendí la cultura y contracultura, no como meros espejismos conceptuales sino como entes vivos de símbolos únicos, que hacen que aquellos rebeldes tengamos un lugar en donde identificarnos y generar un sentido de desarrollo distinto, contestatario, propositivo, original, creativo, seductor, valiente y comprometido haciendo uso del intelecto y del rock, ese género musical que rebasa las melodías y armonías para convertirse en un fenómeno sociocultural de mensajes que da vida e identidad a generaciones enteras.

El rock no fue una etiqueta para ti, sino el sentido del accionar en la cultura, pues el rock es y será cultura, con sus elementos físicos de estética visual; simbólicos de representación y percepciones multisensoriales; elementos de conocimiento pues el rock genera literatura y contiene su propia epistemología musicológica, sin dudarlo, tú José Agustín fuiste un pionero de eso que hoy llaman epistemologías del sur, tú nos enseñaste a vivir y sentir nuestra cultura mexicana, con sus problemas, contextos, colores y aromas particulares; elementos de organización siendo los jóvenes o chavos de onda, como tú querido José, se organizaron para hacer música y conocimiento, en esos hoyos funky, en donde no se necesitó del mundo adulto ni de las industrias de los medios de comunicación de masas, para coexistir desde la cercanía con el otro, pues vivíamos los mismos problemas: el truene de la novia o novio, las drogas y el alcohol, el agandalle de los policías, la vida en el metro de la Ciudad de México, el día a día en los barrios, en las esquinas con los amigos, en la cárcel como tú la viviste por abuso de poder, del ser joven y jamás dejar de serlo, pues no se pugna por una eterna juventud, sino por el ser, una fenomenología del joven que vive en la psique y no está vinculada con un puñado de años.

Tus novelas hablaron para conocer la realidad, de incomodar al poder y al sistema establecido, ya que los jóvenes que te leíamos nos inspirabas un sentido de rebeldía con propósito social, de ser capaces de enlazar de formas coherentes el actuar con nuestras palabras y conceptos. Contigo la literatura de democratizó, ya no fue un fantasma volante sino una toma de conciencia de lo que pasa –ahí afuera- sin artilugios ni lujos de unos cuantos laureados.

Qué profundas convicciones nos hiciste a lo largo de tu vida, yo quise ser un José Agustín, pues con tus palabras me apoyé para realizar dos tesis en mi trayectoria académica, por supuesto que jamás llegué a tu lucidez y riqueza estilística, pero sin duda fuiste de gran influencia en mis años de rabia y juventud.

La primera vez que conocí los textos de George Gerbner y su teoría de la culturización, me remontó a José Agustín, pues no solo el autor mexicano hablaba de temas de culturización, sino que apostaba por la contracultura, que es más cultura que la de élite, hegemónica o impuesta. Nos diste una ruta para repensar lo dicho por la alta cultura, y sobre todo crear otras opiniones, valores, creencias y corrientes que eran y son de la gente común sin ornamentos.

Tú fuiste el verdadero contracultural, luchaste para construir y utilizar puntos en común con varias generaciones para resistirse a las tradiciones paradigmáticas de las viejas ideas. La contracultura mostró otras convicciones de un espíritu de lucha con sus propios elementos físicos, simbólicos, de conocimiento, emotivos y de organización cultural, nos diste un enfoque diferencial que no exageraba sino que descubría las controversias, que se han generado en la historia sobre las denuncias que la contracultura expone, como esas ruedas teóricas ya conocidas  que buscan guiar nuestra conducta. 

Si la cultura es un sistema magno de signos de realidades mediadas y significados para el mundo subjetivo de los seres humanos, entonces la contracultura es un proceso alterno de creación asignado a la desclasificación del ser y estar de los sujetos que piensan, viven y actúan con compromisos de valor social, que se anteponen a la visión conservadora y ofrece libertad para moldear nuestras ideas. 

Y tú José Agustín nos diste los caminos para vivir y pensar desde la contracultura, una pensada, consiente, social, intelectual, viva, única, progresista, incluyente, de música, colores, diversidades, amor y respeto.

Con todo cariño a ti José Agustín lleva al cielo la contracultura. 

LA CIMA 19/01/24
Textos híbridos de periodismo contemporáneo

spot_img

Compartir noticia:

spot_img

Lo más visto