Las juventudes siempre han sido protagonistas de los más grandes cambios en el país.
Las juventudes siempre han sido protagonistas de los más grandes cambios en el país, protagonistas de los movimientos sociales, las luchas que llevan consigo la revolución de las conciencias.
Desde movimientos estudiantiles, luchas colectivas por la dignidad y la defensa de los derechos humanos.
Desde las trincheras sociales, políticas, científicas están las juventudes aportando y luchando.
La legalización del matrimonio igualitario, la despenalización del aborto, la ley Olimpia, medidas afirmativas… todas impulsadas por jóvenes.
¿Entonces por qué tanto adultocentrismo?
Si bien definir qué es la juventud es algo complicado, no cabe duda que el motor de los partidos políticos y de los movimientos sociales son las juventudes.
Sobre todo en política, si me preguntan si realmente existe un Relevo Generacional la respuesta es: ¡claro que sí!
Pero los tienen repartiendo periódicos, marginados en los equipos y con una participación política mínima, no es que no haya jóvenes queriendo participar, el problema es su anquilosamiento y eternizacion en la candidaturas.
Quieren relevos, pero no quieren ser relevados.
Sin embargo hay juventudes en el poder que nos inspiran y son un gran ejemplo de que los jóvenes son excelentes tomadores de decisiones.
Tal es el ejemplo de Andrea Chávez como diputada federal por Chihuahua.
Antonio Atollini, diputado Local de Coahuila.
Miguel Torruco, diputado Federal y aspirante a la jefatura de gobierno de la CDMX.
Y algunos otros y otras que continúan con esta lucha
Un ejemplo claro de juventud y experiencia es Daniel Torres un joven Cabeño que es Fundador de Morena en Los Cabos, Baja California Sur y además constructor del partido, porque muchos se creen con el derecho de exigir porque estuvieron desde un inicio pero no construyeron.
Daniel Torres siempre se ha caracterizado por ser muy cercano a la gente y vivir con transparencia los tres valores fundamentales del movimiento: No mentir, no robar y no traicionar.
Es un hombre de territorio y que conoce a la perfección los dolores de su pueblo pero que también se ha encargado de aliviar los desde su trinchera.
¡Claro que hay Relevo Generacional en México!
El 2024 será nuestro.
