Vale la pena levantarse, vale la pena vivir del ayer,
Vale la pena caerse mil veces, vale la pena no aprender y tener cicatrices.
Vale tomarse una taza de café o en su defecto un poco de té,
Vale reír, compartir, estar solo, buscar no estarlo, escapar y también errar uno o mil veces…
Vale la pena sentir que perdimos el tiempo, vale la pena dudar,
Vale la pena esquivar, negarse, tener miedo,
decir no, decir sí y no querer decir nada…
Vale la pena no compartir glorias, vivirlas, gritarlas, llorarlas
Escupirlas y vomitar por ellas también.
Vale la pena tomar y aventar un libro, escuchar la canción más triste, más alegre,
Tomar el recuerdo más cruel, mirar la pelí que te hace llorar,
sentir que no queda más y buscar un amigo con quien hablar.
Vale la pena tanto, vale no cortar una rosa para mirarla florecer,
A pesar de que sean tus ansias llevarla contigo en mano.
Vale la pena escribir, pintar un cuadro, dibujar mándalas,
Visitar tu lugar favorito, vale la pena tirarse en cama
y no querer ver quien fuera de tu cuarto se encuentra…
Valen los abrazos, las ideas estúpidas, las malas decisiones,
La gente mágica, los sucesos inexplicables,
Vale darte cuenta que tan grande eres,
Cuanto amor compartes con tu gente
Y cuanto amor has ganado por ello.
Vale la pena todo, porque todo te ha hecho crecer,
Estas aquí dando batalla, bendito roble,
Arriesgado héroe.
Vale la pena caer para saber ponerte de pie,
Vale la pena arriesgar y perder para ganar,
Vale la pena estar, respirar y querer,
Vale soñar, reír, cantar, juguetear y deshacer sueños
Para convertirlos en un plan,
Vale cambiar, transformarse , renacer.
Vale la pena vivir,
Estamos aquí con sueños expuestos, el corazón abierto,
la luna de guía, el mar por guarida, dispuestos a siempre comenzar,
¡Adelante pues, que el mundo dispuesto está a tus pies!
