El Gobernador de Nuevo León, Samuel García, cumple hoy dos años de gestión marcados tanto por récords en materia económica, como por el recrudecimiento de las crisis hídrica, de inseguridad e ingobernabilidad en el Estado.
Samuel García dos años
En el ámbito económico, García ha destacado la recepción histórica de Inversión Extranjera Directa (IED), que en el año pasado sumó 4 mil 429.2 millones de dólares y 2 mil 794.9 millones para la primera mitad del 2023.
Esto ha contribuido a que Nuevo León permanezca como líder nacional en generación de empleo, con 148 mil 164 nuevas plazas formales entre octubre del 2021 y agosto de este año.
Además, el Gobierno estatal ha registrado un crecimiento inédito en obra pública, con un programa plurianual que al fin del sexenio, en 2027, sumaría 125 mil millones de pesos con cerca de 300 proyectos ya anunciados o iniciados.
Sin embargo, en el manejo de las crisis hídrica, de movilidad, inseguridad y de ingobernabilidad los resultados no son alentadores.
En materia hídrica, el Gobierno estatal ha destinado cifras millonarias a la construcción del Acueducto El Cuchillo 2 y a nuevos pozos, así como la terminación de la presa Libertad y la aplicación de un sistema de modulación de presiones y combate a las fugas.
Sin embargo, los cortes de agua se han generalizado, desatando protestas ciudadanas.
En movilidad, el Estado decidió adquirir mil 800 camiones para compensar el déficit de unidades en circulación, pero las filas y aglomeraciones persisten, porque aún no llegan todas las unidades contratadas desde diciembre del 2021 y la reestructuración del sistema avanza a vuelta de rueda.
En seguridad, el Gobierno afirma haber invertido ya cerca de 12 mil millones de pesos para mejorar la infraestructura y equipar a Fuerza Civil hasta con vehículos blindados y nueve helicópteros.
Sin embargo, la violencia permanece desde el inicio de la Administración en niveles similares a los de los peores momentos de inseguridad en 2011, sumando hasta ahora 2 mil 694 muertes violentas en los dos años de Gobierno de García.
En el tema de gobernabilidad, desde el año pasado el emecista mantiene un enfrentamiento abierto con diputados del PRI y el PAN, quienes tienen mayoría en el Congreso local.
Fue en octubre del 2022 cuando se desató la guerra, ante la intención del PRIAN de dar al priista Adrián de la Garza la Fiscalía y el rechazo del Gobernador.
Desde entonces se desataron amparos, controversias, denuncias penales, investigaciones de la Fiscalía estatal a funcionarios emecistas y una embestida contra diputados y políticos del PAN.
Ahora que García pretende pedir licencia para competir por la Presidencia, el Congreso local ya advirtió que se la negará y el Gobernador presentó una querella ante el Trife.
Los dos años de gestión de Samuel García han estado marcados por un claro contraste entre los éxitos económicos y los fracasos en materia de gobernabilidad, seguridad e infraestructura.
En el ámbito económico, el Gobernador ha logrado atraer una importante inversión extranjera, lo que ha contribuido a generar empleo y crecimiento.
Sin embargo, en los demás temas, García ha enfrentado una serie de desafíos que han generado descontento entre la población.
La crisis hídrica es uno de los problemas más apremiantes del Estado, y el Gobierno estatal ha sido incapaz de resolverlo.
La inseguridad también es un problema grave, y la violencia se ha mantenido en niveles elevados.
En materia de infraestructura, García ha anunciado grandes proyectos, pero la ejecución de estos ha sido lenta y ha generado dudas sobre su viabilidad.
La crisis de gobernabilidad es el principal obstáculo para que García pueda continuar su carrera política.
El enfrentamiento con el Congreso local ha debilitado la imagen del Gobernador y ha generado dudas sobre su capacidad para gobernar.
Si García logra superar estos desafíos, podría tener una oportunidad de éxito en su carrera política.
Sin embargo, si no logra resolver los problemas que enfrenta el Estado, su futuro político estará en riesgo.
Por: Patricio Álvarez
