
El peso mexicano cerró este jueves en 19.15 unidades por dólar, su mejor nivel en lo que va de 2025, de acuerdo con datos del Banco de México. Este valor representa una apreciación del 8.3 % frente al cierre de 2024, cuando el tipo de cambio se ubicó en 20.89 pesos por dólar.
A pesar de esta recuperación, en los últimos 12 meses el peso ha perdido valor frente al dólar, al pasar de 17.53 unidades por dólar el 5 de junio de 2024, a 19.15, lo que representa una depreciación de 9.2 %.
Especialistas atribuyen el avance reciente de la moneda mexicana a factores externos, principalmente al debilitamiento del dólar, las expectativas de recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos y una menor aversión global al riesgo.
Janneth Quiroz Zamora, directora de Análisis en Monex, señaló que el fortalecimiento del peso está vinculado al debilitamiento del dólar y a la reducción del temor a una recesión global.
Sin embargo, Gabriela Siller, directora de análisis económico en Banco Base, advirtió que no se puede hablar de un “súper peso”, ya que el avance responde más a la debilidad del dólar que a la fortaleza de la moneda mexicana. De hecho, el peso fue la tercera moneda más depreciada entre una muestra de 30 divisas en los últimos 12 meses, solo por encima de la lira turca y el peso argentino.
Siller destacó que las expectativas de un posible recorte en las tasas de interés por parte de la Fed en septiembre, así como el optimismo en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos, China y la Unión Europea, también han influido en el reciente repunte del peso.
Aunque la apreciación favorece variables como la inflación y el costo de la deuda externa, las analistas advirtieron que persisten riesgos que podrían revertir la tendencia, como las tensiones comerciales con Estados Unidos, la revisión del T-MEC en 2026 y señales de desaceleración económica interna.