
El Segundo Tribunal Colegiado del Décimo Noveno Circuito, con sede en Reynosa, Tamaulipas, confirmó la absolución de José Luis Abarca Velázquez, exalcalde de Iguala, Guerrero, por su presunta participación en la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, ocurrida entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014.
El fallo fue resultado de la resolución de un amparo promovido por familiares de los normalistas, quienes impugnaron una sentencia previa que absolvía al exfuncionario. No obstante, el tribunal determinó negar el recurso legal, dejando firme la exoneración de Abarca Velázquez en el único proceso penal que lo vinculaba de manera directa con la desaparición forzada.
En 2019, Abarca Velázquez fue absuelto junto con el entonces jefe de la policía municipal, Felipe Flores, y otras 18 personas, por falta de pruebas suficientes. La resolución actual ratifica aquella decisión.
Abarca seguirá en prisión por el asesinato de un síndico
Pese a la absolución en el caso Ayotzinapa, Abarca Velázquez continuará en prisión, pues en abril de 2024 fue sentenciado a 20 años de cárcel por el asesinato de Justino Carbajal Salgado, quien fuera su síndico municipal. El crimen ocurrió el 8 de marzo de 2013 en la colonia Centro de Iguala, y de acuerdo con las investigaciones, Abarca ordenó directamente su ejecución.
Adicionalmente, el exalcalde enfrenta otros dos procesos judiciales: uno por lavado de dinero y otro por delitos contra la salud.
El caso Ayotzinapa: contexto y controversia
Los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014 siguen marcando la historia reciente del país. Aquella noche, estudiantes normalistas se dirigían a Iguala con la intención de tomar autobuses y asistir a la marcha conmemorativa del 2 de octubre en Ciudad de México. Sin embargo, fueron interceptados por fuerzas de seguridad y presuntamente entregados al grupo criminal Guerreros Unidos.
Seis personas murieron durante los enfrentamientos: tres estudiantes, una mujer civil, el chofer y un futbolista del equipo Avispones de Chilpancingo. Cuarenta y tres estudiantes permanecen desaparecidos desde entonces.
La versión oficial presentada en el sexenio anterior, conocida como la «Verdad Histórica», fue duramente cuestionada. Durante el actual gobierno federal, se realizó una revisión del caso, aunque las diferencias con la versión anterior han sido mínimas. Solo se ha confirmado la identidad de dos de los estudiantes desaparecidos: Alexander Mora Venancio y Jhosivani Guerrero de la Cruz, mediante análisis genéticos realizados por la Universidad de Innsbruck.