Un juez federal revierte decisiones anteriores y encuentra elementos de presunta participación en el homicidio calificado
TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO. — El caso del magnicidio de Luis Donaldo Colosio Murrieta, ocurrido hace tres décadas, ha tomado un nuevo giro judicial. Un juez federal ha dictado auto de formal prisión contra Jorge Antonio Sánchez Ortega, un ex agente del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), por su presunta responsabilidad en el delito de homicidio calificado en agravio del excandidato presidencial.
La decisión fue emitida por Daniel Marcelino Niño Jiménez, juez Cuarto de Distrito en Materia Penal en el Estado de México. El juez determinó que, tras 30 años del crimen perpetrado por el autor material Mario Aburto Martínez, existen finalmente los elementos suficientes que hacen presumir la participación del ex agente en el homicidio.
Este dictamen representa una reversión de decisiones judiciales previas y un triunfo para la Fiscalía General de la República (FGR). Cabe recordar que la FGR había solicitado la orden de aprehensión contra Sánchez Ortega en 2023 y nuevamente en 2024. Sin embargo, estas peticiones habían sido negadas en su momento por Jesús Chávez Hernández, juez Quinto de Distrito de Procesos Penales Federales en Toluca, quien consideró que no existían elementos probatorios que sustentaran la responsabilidad del ex agente en el crimen.
La identidad de Jorge Antonio Sánchez Ortega ha estado vinculada a las investigaciones del asesinato de Colosio, ocurrido en Lomas Taurinas, Tijuana, en 1994. Su formal prisión reabre la discusión sobre la posible existencia de un segundo tirador o la participación de una estructura de inteligencia en el magnicidio, un tema que ha generado controversia y teorías de conspiración por décadas en la vida pública nacional.
La resolución del juez Cuarto de Distrito marca un hito en el prolongado proceso legal que rodea uno de los crímenes políticos más impactantes de la historia reciente de México.
