Washington D.C., 13 de julio de 2025.– En una nueva declaración explosiva y cargada de polémica, el expresidente y actual candidato republicano Donald Trump arremetió este fin de semana contra la actriz y presentadora Rosie O’Donnell, amenazando con revocar su ciudadanía estadounidense, pese a que este derecho está blindado por la Constitución de EE.UU.
“Dado que Rosie O’Donnell no beneficia a nuestro gran país, estoy considerando seriamente retirarle la ciudadanía”, publicó Trump en su red social Truth Social, avivando una disputa personal que ya lleva más de una década.
Trump, quien enfrenta múltiples procesos judiciales y mantiene un discurso polarizante rumbo a las elecciones de 2026, no se detuvo ahí. En el mismo mensaje, calificó a O’Donnell como “una amenaza para la humanidad” y sugirió que “debería quedarse en Irlanda, si la quieren allá”, haciendo alusión al país europeo donde la actriz reside actualmente.
Rosie O’Donnell responde con dureza: «Trump es un estafador y un peligro público»
La respuesta de la actriz no tardó en llegar. A través de su cuenta de Instagram, O’Donnell calificó los dichos de Trump como delirantes e inconstitucionales, y denunció que sus amenazas son un reflejo del autoritarismo que ha marcado su carrera política.
“Trump es un estafador, un abusador sexual y un mentiroso que solo busca perjudicar a Estados Unidos para su propio beneficio”, escribió la actriz, quien también criticó duramente la salud mental del exmandatario al llamarlo “un anciano peligroso, desalmado, con demencia, carente de empatía, compasión y humanidad básica”.
Rosie O’Donnell se mudó a Irlanda en marzo de este año y ha sido una de las figuras públicas más consistentes en su rechazo a las posturas políticas de Trump desde que este llegó a la presidencia en 2016.
“Vas a deportar a todos los que se opongan a tus malvadas tendencias. Eres un mal chiste incapaz de formular una frase coherente”, sentenció la actriz en su mensaje.
Una amenaza sin base legal
Especialistas legales, activistas y medios estadounidenses reaccionaron con alarma ante las declaraciones del expresidente. La ciudadanía estadounidense por nacimiento está protegida por la Enmienda 14 de la Constitución, y no puede ser revocada por decreto presidencial, incluso si se trata de un ciudadano con doble nacionalidad.
El exfiscal federal Neal Katyal declaró en MSNBC que la amenaza de Trump “demuestra una vez más su desprecio absoluto por el Estado de Derecho”. Agregó que, si bien es legal renunciar voluntariamente a la ciudadanía, no existe ningún mecanismo legal que le permita al presidente revocarla unilateralmente.
Organizaciones como la ACLU (Unión Americana de Libertades Civiles) han advertido que esta retórica es una escalada autoritaria por parte del exmandatario, quien continúa utilizando su plataforma para amenazar a sus críticos y alimentar a su base más radical.
Una rivalidad histórica con tintes políticos
La enemistad entre Donald Trump y Rosie O’Donnell no es nueva. Desde 2006, ambos se han intercambiado insultos públicos que han escalado con los años, especialmente durante la administración Trump. Sin embargo, esta nueva amenaza ha sido considerada como un peligroso intento de coartar la libertad de expresión y de intimidar a sus opositores políticos y mediáticos.
Trump se encuentra en plena campaña electoral, con un discurso cada vez más radicalizado. Su amenaza contra O’Donnell no solo carece de sustento jurídico, sino que representa un ataque directo contra los derechos civiles fundamentales.
