El presidente de España, el socialista Pedro Sánchez, declarará mañana a las 11 hrs. ante un juez de instrucción en condición de testigo en el palacio de la Moncloa, al estar presuntamente involucrado en una trama de corrupción que afecta a su esposa, Begoña Gómez, su hermano, por nombre artístico David Azagra, su gobierno al completo y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
Begoña Gómez está imputada por corrupción y tráfico de influencias debido a una serie de negocios que emprendió en el mismo momento en que su marido, el presidente del gobierno, se instaló en el Palacio de la Moncloa, residencia oficial de los mandatarios españoles.
Entre los turbios negocios, destaca el enriquecimiento de 20 millones de euros de un empresario amigo de la pareja, Carlos Barrabés, con quien establecieron amistad en sus estancias en el pueblo de Benasque, en el Pirineo de Huesca. Gómez junto con Barrabés impulsaron una cátedra en la Universidad Complutense de Madrid, en la que la mujer de Sánchez ejerció como directora sin tener ni siquiera título de licenciada y violando la normatividad institucional.
Gómez creó también la organización Africa Foundation aprovechando los viajes del presidente de España a países africanos para extender sus negocios.
Hasta el momento, Begoña Gómez ha declarado como testigo en una ocasión ante el juez instructor, Juan Carlos Peinado. Sin embargo, en la primera comparecencia se reservó el derecho de no declarar. Luego fueron llamados también a declarar como testigos el Rector de la Universidad Complutense, Joaquín Goyache Goñi, y el empresario montañés Barrabés. Ambas declaraciones se limitaron a responder de manera vaga e imprecisa a las preguntas del juez. Tras esa primera comparecencia, ambos han cambiado su situación judicial de testigos a imputados que comparten con Begoña Gómez.
Ya en calidad de imputada, Gómez asistió una vez más a prestar testimonio ante sede judicial amparándose igualmente en su derecho a guardar silencio.
En el marco de estas actuaciones judiciales, el juez Peinado citó a declarar hace unos días en el Palacio de la Moncloa a Pedro Sánchez, sobre quien pesan sospechas de haber intervenido en favor de los negocios de su mujer, Begoña Gómez.
A pesar de maniobras por parte de la Fiscalía para evitar la declaración del presidente del gobierno, así como una carta de Pedro Sánchez alegando que en su condición de máximo mandatario puede acogerse al derecho a declarar por escrito, el juez Peinado se ha reafirmado en tomar declaración mañana martes, a las 11 horas, en la Moncloa, en virtud de que su citación, como consta en la provisión judicial, se hace al ser Pedro Sánchez esposos de Begoña Gómez y no presidente del gobierno.
Hay que destacar la campaña de difamación y acoso que sufre el juez Peinado desde que abrió diligencias por parte del presidente del gobierno, de los ministros de su gabinete, de la prensa servil al PSOE y al gobierno.
