La Cámara Baja del Parlamento alemán (Bundestag) aprobó este viernes la legalización de la posesión y consumo de hasta 50 gramos de cannabis recreativo, sujeta sin embargo a una serie de restricciones.
A partir de abril, cuando entrará en vigor la nueva ley, los mayores de 18 años podrán cultivar en casa un máximo de tres plantas de cannabis para autoconsumo, o poseer 50 gramos de flores secas en su espacio privado (un máximo de 25 gramos si se hallan en el espacio público). A partir de julio será legal crear organizaciones de hasta 500 miembros para cultivar cannabis de forma colectiva y no comercial.
A más tardar, 18 meses después de la entrada en vigor de la nueva ley, se realizará una evaluación para determinar qué efecto está teniendo para la salud de niños y adolescentes. Abogados han advertido sobre la considerable carga que supondrá la revisión de hasta 100,000 delitos relacionados con el cannabis y asociaciones de médicos han alertado del riesgo que comporta la droga precisamente para los jóvenes.
Para los legisladores que promueven la ley, esta es una forma de legalizar el autoconsumo y crear una “alternativa” al mercado negro, al tiempo que incrementa las penas para los traficantes que venden cannabis a menores y prevé campañas para concienciar a personas jóvenes del peligro que conlleva el consumo mientras el cerebro está en crecimiento.
El proyecto de ley, propuesto por el ministro de Sanidad, Karl Lauterbach, en abril del año pasado, ha sido objeto de polémica; en una versión sustancialmente modificada, hoy obtuvo 407 votos a favor y 226 en contra. La oposición cristianodemócrata y los ultraderechistas de Alternativa por Alemania (AfD), votaron en contra.