Israel ha escalado el conflicto en Líbano al matar la mañana de este miércoles a Khalil al Maqdah, uno de los líderes del partido oficial Al Fatah. Es la primera víctima de esta organización desde octubre pasado en que otro miembro de Al Fatah fue objetivo de las Fuerzas de Defensa de Israel. Al Fatah es la organización a la que pertenece el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas.
Khalil al Maqdah era comandante de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, brazo armado de Fatah. En abril, las autoridades de Tel Aviv denunciaron a Al Maqdad de transportar armas de origen iraní a la Cisjordania ocupada. Este asesinato selectivo se ha producido en la localidad de Saida, a 55 kilómetros de distancia de la frontera entre Líbano e Israel.
El Ejército hebreo informó este miércoles que había realizado “un ataque aéreo” contra Jalil al Maqdah. Israel acusa a Khalil al Maqdah y a su hermano Mounir Maqdah de “actuar en nombre de la Guardia Revolucionaria iraní”, de estar “implicados en la organización de atentados terroristas” y en el “tráfico de armas” con destino a Cisjordania.
El conflicto entre Hezbol e Israel cada vez afecta más a la población civil de la región. En Líbano hay un temor creciente de que los campos de refugiados palestinos, que operan como bases de Hamas y milicias palestinas, se vuelvan objetivos de bombardeos israelíes.
Por otro lado, Antony Blinken terminó ayer su gira por Oriente Medio sin llegar a ningún acuerdo relativo a la tregua en Gaza, aunque las negociaciones continúan esta semana con Egipto y Qatar como mediadores.
Estados Unidos, también uno de los países mediadores en las negociaciones para el alto al fuego, pretende apurar todas las opciones para llegar a un acuerdo de paz ante las amenazas de Irán y sus aliados de atacar Israel en represalia por el asesinato del jefe de Hamas el 31 de julio en Teherán.
Si bien Israel ha aceptado las condiciones para la tregua propuestas por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, Hamas las ha rechazado al no presentarse en la mesa de negociaciones. El grupo islámico reivindica que sus propuestas deben ser tomas en cuenta para “alcanzar un alto al fuego”, como la libre circulación de palestinos por la Franja de Gaza y la retirada de las tropas israelíes de la frontera con Egipto.
