El conflicto entre Rusia y Ucrania ha puesto nuevamente en el centro de atención la posible expansión de la Unión Europea (UE). No obstante, la adhesión de países con economías más débiles puede suponer una carga financiera para el bloque. Veamos más de cerca este complejo tema.
Tensión entre Polonia y Ucrania
En febrero de este año, más de 200 agricultores polacos realizaron manifestaciones para protestar por la llegada de grano barato proveniente de Ucrania. En el pueblo de Kock, cientos de tractores bloquearon una carretera para impedir la entrada de este grano, ya que temen que la adhesión de Ucrania a la UE ponga en riesgo su sustento.
Uno de los manifestantes señaló: «Deberían olvidarse de eso. Es una idea descabellada». Esto resalta la preocupación de los agricultores polacos sobre los posibles impactos económicos de la entrada de Ucrania en la UE.
Impulso político frente a consideraciones presupuestarias
El conflicto entre Rusia y Ucrania ha acelerado las conversaciones sobre la adhesión de países como Georgia y Moldavia a la UE. Según Thu Nguyen, subdirectora del think tank Jacques Delors Center, la expansión se ve como un instrumento de seguridad para el bloque. Sin embargo, hay inquietudes sobre el impacto económico que podría tener esta expansión.
La UE destina gran parte de su presupuesto al desarrollo regional y la agricultura. Los países menos ricos reciben más fondos de los que aportan, y los ocho países candidatos actuales son más pobres que los miembros actuales. Turquía es otro país candidato, aunque su proceso está suspendido.
Montenegro: Un caso prometedor
Montenegro es uno de los países más avanzados en el proceso de adhesión a la UE. Alrededor del 80% de su población apoya unirse al bloque, y su incorporación no supondría una carga significativa para el presupuesto. Sin embargo, su adhesión tampoco traería grandes beneficios económicos a la UE.
Ucrania: El desafío más grande
Ucrania es el país más grande y menos próspero entre los candidatos. Además, está en guerra con Rusia y necesita una enorme cantidad de fondos para su reconstrucción. Si Ucrania ingresara a la UE, se convertiría en el principal productor agrícola del bloque y podría impactar negativamente a otros países miembros, como Polonia.
Protestas de agricultores polacos por la incertidumbre económica
Un agricultor polaco expresó: «Lo más probable es que quebraríamos. Porque nos inundarían fácilmente con productos mucho más baratos de Ucrania». Esta preocupación se extiende a varios sectores agrícolas de la UE.
Costos de la ampliación de la UE
Una investigación interna del Consejo Europeo estima que admitir a todos los países candidatos costaría aproximadamente 256,000 millones de euros. De ese monto, se espera que Ucrania reciba alrededor de 186,000 millones de euros en siete años, sin contar los gastos de reconstrucción.
La experta Thu Nguyen sugiere que el impacto financiero no sería tan alto como sugieren algunas cifras, pero aún no está claro cómo se financiaría la expansión. Algunos posibles métodos incluyen la contribución de los Estados miembros o la recaudación de nuevos fondos a través de impuestos o ajustes de carbono.
El futuro de la expansión de la UE depende en gran medida de la composición del nuevo Parlamento Europeo, que se elegirá en junio. La decisión sobre la velocidad y el alcance de la adhesión de nuevos países está en manos de los legisladores.
