El próximo 28 de julio se conocerá si la oposición venezolana, como indican las encuestas, se hace con la victoria o, por el contrario, retiene otra vez la presidencia Nicolás Maduro. A solo seis días de las votaciones, el presidente de Brasil, Lula da Silva, ha dado a conocer sus impresiones.
“Le he dicho a Maduro que la única oportunidad para que Venezuela regrese a la normalidad es tener un proceso electoral ampliamente respetado”. Y ha añadido: “Necesita aprender que cuando se gana, te quedas; cuando se pierde, te vas”.
Ha insistido en que el actual gobierno venezolano debe de respetar el proceso democrático, “si Maduro quiere ayudar a su país”. Sin embargo, el comentario más repetido de las declaraciones del mandatario brasileño se refiere a la amenaza que su homólogo pronunció hace unos días: “Me asustaron los comentarios de Maduro sobre un derramamiento de sangre si pierden”.
Las palabras de Lula cobran mayor relevancia si se advierte que es aliado y amigo de Maduro. El comentario del brasileño invita a pensar que el cambio en Venezuela es posible en estas elecciones.
Las encuestas señalan que el opositor Edmundo González, a quien apoya María Corina Collado, se alzará con el triunfo, consiguiendo una ventaja de 20 puntos sobre el oficialismo en unos comicios con una participación estimada del 70 por ciento de la población con derecho al voto.
