Esta tarde, en entrevista con Fox News, Greg Abbott, Gobernador de Texas, afirmó no le importa desafiar al Tribunal Supremo de Estados Unidos y ordenará que la Guardia Nacional texana mantenga el alambre de púas que colocó en la frontera con México para disuadir la entrada de migrantes.
Texas’ razor wire is an effective deterrent against the illegal border crossings encouraged by Biden’s open border policies.
— Greg Abbott (@GregAbbott_TX) January 24, 2024
We continue to deploy this razor wire to repel illegal immigration. pic.twitter.com/PE8wiMYaYI
En la entrevista, Abbott señala que “Texas tiene el derecho constitucional a defenderse” y que el Presidente demócrata Joe Biden “ha abdicado su responsabilidad de proteger la frontera”, pues equipara la inmigración a la delincuencia.
El pasado lunes, Joe Biden solicitó que esta barrera fuera retirada de la frontera en Eagle Pass alegando que impide a los agentes de la Patrulla Fronteriza federal acceder al área y desempeñar sus funciones. En respuesta, Abbott declaró el miércoles la existencia de una “invasión” en Texas, lo que a su juicio otorga a su Gobierno “la autoridad constitucional de defender” al estado.
Además de la colocación del alambre de púas y el despliegue de la Guardia Nacional, Abbott ha enviado decenass de autobuses con migrantes a Washington y a varias otras ciudades gobernadas por demócratas como parte de su enfrentamiento con las políticas de Biden.
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Abott también instaló en el pasado una polémica barrera de boyas en un tramo del río Bravo e impulsó una ley para criminalizar a los migrantes que cruzan de forma irregular la frontera, ambas medidas criticadas por Andrés Manuel López Obrador.
