Reconocido como una de las voces más representativas del rock en México, falleció a los 56 años tras una batalla contra el cáncer de estómago
El rock mexicano está de luto. Salvador Aguilar Hurtado, mejor conocido como Xava Drago, vocalista y alma de la banda Coda, falleció este jueves a los 56 años tras enfrentar con valentía una dura batalla contra el cáncer de estómago.
La noticia fue confirmada por sus compañeros de banda a través de un comunicado emotivo:
“Nuestro corazón está roto. Con profunda tristeza queremos compartir con ustedes que nuestro amado Xava ha partido. Estamos profundamente agradecidos por haber compartido la vida y el escenario con él. Ha sido un gran honor y una gran fortuna”.
Xava Drago había hecho pública su enfermedad a principios de agosto, revelando que los tratamientos ya no estaban dando resultados. En ese momento, el cantante dejó claro que su enfoque estaría en el agradecimiento y la despedida.
«Desafortunadamente los doctores ya no pueden hacer nada por mí. Sólo me queda agradecer de corazón a mi padre; a mis hermanas, que han sido unos ángeles; a mis sobrinos; y a mis amadas Ela, Nicole y Sofía», expresó con serenidad y amor en un mensaje que conmovió a sus seguidores.
Previó su partida con un texto final en el que se despidió con palabras llenas de gratitud y libertad:
“Hoy mi vida ha llegado a su fin y solo me queda decir que la viví a mi manera, canté, ‘rocanrolie’, pero sobre todo gocé y amé cada instante maravilloso que construí. (…) Me despido con mucho amor para todos”.
Xava Drago fue mucho más que una voz poderosa en el escenario. Su entrega, autenticidad y carisma lo convirtieron en un referente del rock nacional. Como líder de Coda, dejó una huella indeleble en la música en español con canciones emblemáticas como «Aún», «Tócame», «Suelto el deseo» y «Veinte Para las Doce», himnos que marcaron a toda una generación.
Durante la década de los noventa, Coda se consolidó como una de las bandas más influyentes del movimiento rockero latinoamericano, y Xava Drago fue su rostro y voz inconfundible: potente, emocional y siempre cercano a su público.
Su legado queda grabado no solo en la historia del rock, sino en el corazón de quienes encontraron en su música un refugio, una inspiración y un grito de identidad.