El dueto conformado por Alaska y Nacho Canut se presenta este jueves y viernes en el Teatro Metropolitan con una selección de temas representativos de su carrera
Electro pop y glam que tiene bases firmes en el punk y el rock, es lo que desde la década de los ochenta nos ha ofrecido Fangoria, que antes fue Alaska y Dinarama.
El dueto conformado por la cantante Alaska y Nacho Canut regresan a la Ciudad de México para ofrecer un par de conciertos que desde que se anunciaron prácticamente agotaron las entradas; aunque hoy todavía hay algunas localidades.
Antes de su llegada, Alaska platicó con La Torre News sobre su visión de la música, México y las nuevas realidades.
“Tu postura ante la vida, con tus preferencias, tu sexualidad y tus creencias, no determina el tipo de música que te pueda gustar”, comenta la cantante sobre la libertad de elegir y los prejuicios que el público se hace muchas veces “sobre el tipo de música, y eso es algo que ha pasado en todos los tiempos”.
Alaska habla de cómo hace unas décadas las cosas eran diferentes, “las etiquetas a veces son complicadas y es verdad que a las cosas hay que llamarlas de alguna forma, pero cuando nosotros éramos pequeños lo vivíamos y punto. Sabías que no vivías la vida del resto de la humanidad, pero sí que era tu realidad y eso es lo que yo he vivido. Me he creado desde los 14 años una realidad paralela con la gente que yo pensaba que quería que fuera parte de mi mundo y no creo que sea muy distinto a lo que hacemos todos.
“Por mucho que ahora las cosas tengan un nombre, incluso a veces no sabes que uso darle a determinadas cosas. Todos tenemos un micromundo y es la forma de supervivencia que tenemos todos y eso es parte de la diversidad. Antes todo estaba muy mezclado y nadie te preguntaba nada, nadie se preguntaba nada; por otro lado era una forma de no encasillar”.
Y en esa forma diferente que Alaska tuvo de vivir, un día se encontró con un libro que le cambió la vida, o le marcó el camino. “Iggy Pop me entró por los ojos cuando vi una foto de él en un libro llamado Gay Rock, de 1974 escrito por Eduardo Haro; en ese libro vi fotos de Iggy Pop, me adentré en Lou Reed y en Bowie y después de eso me fui a la tienda de discos a escucharlos.
“Descubrí esa música tan importante para mí en un libro y en las fotos. Las fotos son fundamentales sobre todo en un mundo sin internet, donde no había videos ni nada, por eso las portadas de discos eran tan importantes y para mi siguen siendo importantes”.
Pasando por Alice Cooper, Motley Crue, el punk y la música electrónica “hay tantas cosas que me gustan y tantos artistas que me influyen, que no acabaríamos nunca”, comenta sobre sus influencias.
Sobre lo que van a presentar este jueves y viernes, dice que hacen “un repertorio muy ecléctico, casi de grandes éxitos, muy como si fuera un festival, con sencillos, salvo dos o tres canciones muy especiales”.
De su amor por México no hay duda, ni de sus lugares favoritos, como el Centro y la Lagunilla, “pero si yo me tuviera que quedar con algo, sería con los shows del transformismo. Cuando voy al Spartacu´s (en Neza) y veo siete Alaskas representando siete momentos de mi vida, ya me puedo morir tranquila porque me parece el mejor homenaje que te pueden hacer”.
Para Fangoria dar conciertos en la CDMX “es llegar a un lugar que conoces, sobre todo en al Metropolitan que nos gusta mucho. Parece utópico, pero cuando sabemos que van músicos compañeros por primera vez a México les decimos ´ya verás como es el público, son educados y conocedores del artista que va a ver”, eso se agradece mucho y te acompaña mucho en un escenario.