La chica Almodóvar, actriz leyenda del cine español, murió este martes a los 78 años
El cine español llora la partida de una de sus grandes estrellas. Marisa Paredes, chica Almodóvar y figura fundamental del cine ibérico, falleció este martes en Madrid a los 78 años. La noticia fue confirmada por la Academia de Cine Español, institución que la actriz presidió en su momento.
Según reportes locales, Marisa Paredes sufrió un infarto en la madrugada. Su salud, que en general era buena, había dado señales de malestar esa misma noche. La actriz había acudido el pasado domingo al Teatro Español para ver la obra Luces de Bohemia, en la que actuaba su hija, María Isasi. Horas después, fue llevada al hospital Fundación Jiménez Díaz por su pareja, Chema Prado, cineasta y ex director de la Filmoteca Española. La actriz murió en el hospital.
La actriz siempre tuvo claro su posicionamiento ideológico y fue constante activista en pro de diversas causas sociales, defensora de derechos humanos y parte fundamental de los movimientos sobre la causa de las mujeres.
Marisa Paredes será siempre recordada como una de las grandes exponentes del cine español contemporáneo. Su carrera abarcó más de cuatro décadas, durante las cuales dejó una huella imborrable en títulos icónicos como Todo sobre mi madre (1999) de Pedro Almodóvar y El coronel no tiene quien le escriba (1999) de Arturo Ripstein. Su trayectoria fue reconocida con premios y distinciones, como el Premio Nacional de Cinematografía en 1996, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en 2007 y el Goya de Honor en 2018.
La actriz también participó en proyectos internacionales de gran renombre. Su papel en El espinazo del diablo (2001), de Guillermo del Toro, es recordado como una de sus contribuciones más destacadas al cine de terror. Además, Marisa Paredes volvió a colaborar con el director mexicano Arturo Ripstein en Profundo carmesí (1996), una de las películas más inquietantes y audaces de su carrera. Su trabajo junto a otros maestros del cine, como Roberto Benigni en La vida es bella (1997), Amos Gitai y Raoul Ruiz, consolidó su estatus como una actriz de talla mundial.
En una de sus últimas entrevistas, Marisa Paredes expresó su admiración por el cine mexicano, destacando la figura de Arturo Ripstein, a quien consideraba “el Buñuel de México”. «Creo que, a veces, en México no valoran a sus directores, Ripstein es un genio», comentó en ese entonces.
La diva del cine español estaba planeando su regreso a los escenarios en 2024, con una nueva obra teatral, lo que ha hecho su partida aún más conmovedora para todos quienes la admiran y respetan.
Como homenaje póstumo, se ha anunciado que mañana se rendirá un tributo a Marisa Paredes en el Teatro Español de Madrid, un escenario fundamental en su carrera porque se presentó con proyectos y ceremonias fundamentales y en el que muchos tuvieron el privilegio de compartir su arte.