Este sábado en la Casa Blanca entregó el mayor honor civil del país otorgado a deportistas, artistas, políticos, diplomáticos y personalidades sobresalientes
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, entregó este sábado la Medalla Presidencial de la Libertad a 19 personas que han destacado en sus respectivos campos, otorgándoles el mayor honor civil del país. En una ceremonia emotiva celebrada en la Casa Blanca, Biden reconoció a deportistas, artistas, activistas, diplomáticos y líderes políticos que, a lo largo de sus carreras, han contribuido de manera extraordinaria al bienestar de la sociedad y el progreso mundial.
Entre los homenajeados, destacó la presencia de personalidades de la cultura popular y el activismo. Bono, el icónico cantante de la banda irlandesa U2, y activista comprometido con diversas causas, recibió el galardón, junto a la leyenda del baloncesto Earvin «Magic» Johnson, el cual marcó una época en la NBA. También fueron premiados la influyente editora de moda Anna Wintour, los actores Denzel Washington y Michael J. Fox, y el reconocido diseñador de moda Ralph Lauren.
Sin embargo, hubo una notable ausencia en la ceremonia: el futbolista Lionel Messi, quien según la Casa Blanca, debía recibir el galardón, pero no asistió al evento. Messi, quien tampoco envió a un representante, no fue mencionado durante la ceremonia, lo que sorprendió a algunos.
La Casa Blanca destacó que todos los homenajeados son «grandes líderes» por su carácter y por las contribuciones extraordinarias que han realizado a sus países y al mundo. Entre los galardonados también se incluyó al chef español José Andrés, fundador de la ONG World Central Kitchen, una organización que ha llevado ayuda alimentaria a zonas de conflicto como Gaza. Por su parte, la famosa investigadora de primates Jane Goodall, referente del movimiento ambientalista, fue reconocida por su incansable trabajo en la protección de los animales y la conservación de la biodiversidad.
El evento también rindió homenaje a figuras de perfil más político. El multimillonario y filántropo George Soros, que no pudo estar presente, fue representado por su hijo, Alex Soros. La Casa Blanca destacó su apoyo a proyectos globales que promueven la democracia, los derechos humanos, la educación y la justicia social. Hillary Clinton, ex senadora y ex secretaria de Estado, fue otra de las galardonadas, destacándose por su histórica trayectoria en el servicio público y por haber sido la primera mujer nominada por un partido importante para una elección presidencial en Estados Unidos.
Además, en un emotivo gesto, Biden entregó la Medalla Presidencial de la Libertad a título póstumo a Robert Francis Kennedy, conocido como «Bobby» Kennedy. El hermano del presidente John F. Kennedy, quien fuera ministro de Justicia y candidato presidencial, fue asesinado en 1968 mientras aspiraba a la nominación demócrata. Su legado sigue siendo un símbolo de lucha por los derechos civiles y la justicia social en Estados Unidos.