¡Mano de Piedra ha vuelto a triunfar! El legendario boxeador panameño, Roberto Durán, superó con éxito una cirugía a corazón abierto para implantarle un marcapasos, saliendo victorioso de un nuevo round en su incansable batalla por la vida.
«¡El campeón ha vuelto!», exclamó su esposa, Felicidad Iglesias, al conocer el parte médico favorable. La familia Durán, bañada en lágrimas de alegría, agradeció a Dios y a los miles de fanáticos que enviaron sus oraciones y mensajes de apoyo durante este difícil momento.
Un héroe bajo las luces del quirófano
El pasado viernes, la noticia del ingreso de Durán al hospital tras sufrir un bloqueo auriculoventricular completo conmocionó a Panamá y al mundo del boxeo. El expugilista, de 72 años, enfrentaba una batalla crucial contra un rival inesperado: su propio corazón.
Con la determinación que lo caracterizó en el cuadrilátero, Durán afrontó la cirugía con la valentía de un campeón. La intervención, realizada el día de ayer, fue todo un éxito, devolviendo la esperanza a su familia, amigos y a todo un país que lo considera un héroe nacional.
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Roberto «Mano de Piedra» Durán no solo ha dejado huella en el mundo del boxeo, sino también en el corazón del pueblo panameño. Con una carrera profesional que abarcó desde los 16 hasta los 50 años, conquistó 103 victorias en 119 combates, ganándose el apodo que lo inmortalizó.
Su palmarés incluye 12 títulos mundiales en distintas categorías, incluyendo la de pesos ligeros, donde reinó de manera absoluta. Batallas épicas contra Ken Buchanan, Sugar Ray Leonard, Davey Moore e Iran Barkley quedaron grabadas en la memoria de los aficionados al boxeo.
