El Museo Scuderie del Quirinale presta oído a los sonidos del México prehispánico con esta exposición conformada por 163 instrumentos musicales
La exposición Tlapitzalli: Ritos y sonidos del México antiguo abrió sus puertas el fin de semana en el Museo Scuderie del Quirinale en Roma, Italia. Esta muestra, que se mantendrá hasta el 14 de septiembre, presenta una colección inédita de 163 instrumentos musicales prehispánicos, la mayor cantidad de estos artefactos que ha viajado al continente europeo.
La exposición ofrece una inmersión en la función y significado de la música en las antiguas culturas mesoamericanas, revelando la complejidad y profundidad de sus prácticas musicales. El nombre Tlapitzalli, que se traduce como «flauta» en náhuatl, hace referencia a uno de los instrumentos representativos de la muestra, conocida por su capacidad para emitir sonidos agudos.
Con base a lo anterior, en la inauguración de la exposición estuvo presente el flautista mexicano Horacio Franco, quien interpretó algunos temas en torno a la muestra.
Los instrumentos exhibidos abarcan una amplia gama de culturas y periodos, desde las flautas de Teotihuacan y las piezas de las culturas mayas, hasta aquellos adaptados para simular sonidos de órganos. Estos artefactos no solo destacan la destreza técnica de los antiguos artesanos, sino también la importancia de la música en contextos religiosos, sociales y ceremoniales.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha jugado un papel crucial en el desarrollo de esta exposición, proporcionando una visión detallada de cómo la música formaba parte integral de la vida cotidiana en las culturas mesoamericanas. Los expertos del INAH han investigado el papel de estos instrumentos en diferentes etnias, así como su función dentro de estructuras sociales y religiosas.
Los artefactos en la exposición están profundamente vinculados con mitos y deidades mesoamericanas. Por ejemplo, algunos instrumentos están dedicados a Quetzalcóatl-Ehécatl, el dios del viento, y otros a su contraparte, Tezcatlipoca. Los mitos que rodean estos instrumentos revelan la importancia de la música en las prácticas religiosas, como el mito de Mictlantecutli y el papel de los instrumentos en la creación de la humanidad.
La exhibición destaca no solo la diversidad de los instrumentos, sino también la habilidad de los artesanos prehispánicos, quienes a menudo se especializaban en la fabricación de estos artefactos. Muchos de los objetos exhibidos, elaborados con materiales comunes, han sido restaurados con éxito, permitiendo a los visitantes apreciar la pericia y el conocimiento que los antiguos mesoamericanos dedicaban a la creación musical.
Con un costo de entrada de 7 euros, Tlapitzalli: Ritos y sonidos del México antiguo se establece como una ventana al vibrante mundo de la música prehispánica, y ofrece una experiencia educativa y cultural única para los visitantes en Roma, ya que también pueden escuchar los sonidos que han sido recreados para esta exposición.