En «Picasso: Printmaker» el Museo Británico muestra cerca de 80 grabados del maestro andaluz, con temas como cuentos de hadas, la muerte y el abismo fascista
El Museo Británico presenta Picasso: Printmaker, una exposición que revela una de las facetas menos conocidas del pintor: su obra como grabador. Con casi un centenar de grabados seleccionados de los más de 2,400 que creó, la muestra ofrece una mirada profunda a su experimentación con técnicas como el aguafuerte, la litografía y el linóleo.
La curadora Catherine Daunt destaca que la exposición busca resaltar el grabado como una parte fundamental del trabajo de Picasso, una área menos explorada que sus célebres pinturas. «Queremos mostrar que el grabado fue un campo creativo muy importante para él», señala Daunt.
La muestra recorre la evolución de Picasso desde sus primeros trabajos en París en 1904 hasta sus últimos grabados en 1971, abordando temas como la pobreza, el arte clásico y la Guerra Civil española. Entre las obras más destacadas está la Suite Vollard, una serie de 100 grabados que refleja su reflexión sobre la figura humana y la política, incluida una crítica al régimen franquista.
Además, la exposición ofrece una visión íntima del artista a través de sus grabados, que a menudo reflejan sus emociones y relaciones personales. La serie 347 Suite, realizada en 1968 a los 86 años, es una de las más significativas, mostrando su vasta inspiración, desde grandes maestros hasta la mitología y la vida cotidiana.
Picasso: Printmaker estará abierta desde el 7 de noviembre hasta el 30 de marzo de 2025, y brinda una oportunidad única de explorar el legado gráfico de uno de los artistas más influyentes del siglo XX.