El proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) fue entregado el viernes al Poder Legislativo y afectará a sectores como el INAH, Radio Educación y las librerías Educal, que desaparecerán
El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) para 2025, presentado por el Gobierno de Claudia Sheinbaum a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), contempla una reducción significativa en los fondos destinados al sector cultural. Según el presupuesto propuesto, el Gobierno destinaría solo 12 mil 81 millones de pesos a la cultura, lo que representa una disminución del 27.89% en comparación con los 16 mil 755 millones asignados en 2024. Este ajuste, aunque aún sujeto a posibles modificaciones o reasignaciones, podría impactar gravemente a diversas instituciones culturales del país.
Uno de los sectores más golpeados por esta propuesta es el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), cuya asignación proyectada para 2025 es de 4 mil 402 millones de pesos. Esto representa una drástica caída del casi 50% respecto a los 8 mil 006 millones de pesos del presupuesto de 2024. Esta reducción se da en un contexto donde el INAH había recibido recursos extraordinarios para la compra de terrenos con vestigios arqueológicos, especialmente en el sureste de México, área vinculada al proyecto del Tren Maya. Si se aprueba tal cual el presupuesto, la asignación al INAH quedaría por debajo incluso de los 4 mil 968 millones de pesos que se le destinaron en 2023.
Aparte del INAH, otras dependencias clave en la cultura mexicana también verían reducidos sus recursos. La Dirección General de Sitios y Monumentos de la Secretaría de Cultura (SC) enfrentará una disminución drástica, pasando de más de 200 millones de pesos a tan solo 83 millones. De igual manera, la Subsecretaría de Desarrollo Cultural de la SC sufrirá una disminución significativa, recibiendo 83 millones de pesos, menos de la mitad de lo que tuvo en 2024.
El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) también vería recortado su presupuesto en un 6.7%, quedando con 3 mil 386 millones de pesos para el próximo año. Radio Educación, que atraviesa dificultades financieras, experimentará un recorte de 7.5% en su presupuesto, dejándola con 80 millones 120 mil pesos.
Otro cambio relevante será la desaparición de la red de librerías Educal dentro de la estructura de la Secretaría de Cultura, lo que implica la falta de asignación presupuestaria para esta red. Además, el Fideicomiso para la Cineteca Nacional, que desde este año opera tres sedes en lugar de una, verá una reducción de casi 50 millones de pesos, recibiendo 46 millones 904 mil pesos, lejos de los recursos necesarios para fortalecer su infraestructura.
A pesar de la tendencia generalizada a la baja, algunas entidades del sector cultural sí recibirían incrementos en sus asignaciones. Los Estudios Churubusco Azteca, el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) y el Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (Fonart) verían un ligero aumento, aunque en un rango que va del 1% al 3%. Sin embargo, la mayoría de las instituciones bajo la gestión de la Secretaría de Cultura, como el Centro Cultural Tijuana, el Canal 22, el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC) y el Instituto Nacional de las Lenguas Indígenas (Inali), enfrentarán una caída de aproximadamente 4% en sus presupuestos.
Si el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación es aprobado tal como está, el recorte en los recursos destinados a la cultura podría tener un impacto directo en la capacidad operativa de diversas instituciones. En un momento en que el sector cultural mexicano enfrenta desafíos financieros y logísticos, este ajuste presupuestal podría limitar la oferta de actividades culturales y educativas, así como la preservación y promoción del patrimonio nacional.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público aún tendrá que enfrentar el proceso de revisión y aprobación del presupuesto, lo que podría llevar a ajustes adicionales antes de que la asignación final sea ratificada por el Congreso. Sin embargo, el panorama actual plantea interrogantes sobre el futuro del financiamiento a la cultura en México y el impacto que estos recortes podrían tener en la diversidad y accesibilidad cultural en el país.