El Día de Muertos, una de las tradiciones más emblemáticas de México, se perfila como un importante motor económico para el Estado de México este año. Según datos recopilados por la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (CANACO) del Valle de Toluca, se estima que la festividad generará una derrama económica total de 2,420 millones de pesos, con una parte significativa, 968 millones de pesos, atribuidos específicamente al Valle de Toluca.
Dentro de los sectores comerciales beneficiados, se proyecta un aumento del 10% en las ventas de florerías, impulsado por la tradición de adquirir flores para adornar las ofrendas a los seres queridos fallecidos. Asimismo, se espera un incremento del 5% en las ventas de dulces típicos, como el pan de muerto, mole y tamales, reflejando la costumbre de preparar platos tradicionales durante esta festividad.
Las tiendas de disfraces también anticipan un aumento en la demanda, dado que muchas personas optan por disfrazarse en honor a la celebración del Día de Muertos. Del mismo modo, se prevé un crecimiento en las ventas de las pastelerías y panaderías, atribuido en gran parte al consumo del pan de muerto, un producto central en la conmemoración de esta festividad.
El presidente de la CANACO del Valle de Toluca, Jorge Luis Pedraza Navarrete, instó a los consumidores a realizar sus compras en establecimientos legalmente establecidos, con el objetivo de garantizar la calidad de los productos y contribuir al desarrollo económico del estado.
La tradición del Día de Muertos no solo rinde homenaje a los seres queridos que han fallecido, sino que también impulsa el comercio local y regional, fortaleciendo la economía del Estado de México en un momento crucial de recuperación económica post-pandemia.
Por: Ingrid Castillo