El Día Internacional de la Mujer es una de las celebraciones más importantes del mes de marzo. Está destinado a visibilizar a las mujeres que siguen luchando por la igualdad de derechos, además de una mayor participación y cumplimiento de lo estipulado en las diversas leyes de los países.
A mediados del siglo XIX, en el corazón de la “Revolución industrial”, el 8 de marzo de 1857, miles de trabajadoras textiles decidieron salir a las calles de Nueva York con el lema “Pan y rosas”, protestando por sus condiciones laborales: en busca de la reivindicación de un recorte del horario y el fin del trabajo infantil.
La ONU instituyó, en 1975, el Año Internacional de la Mujer. Desde entonces se conmemora el Día Internacional de la Mujer. Para 1977, la Asamblea General de las Naciones Unidas formalizó oficialmente este día.
Te puede interesar: ¿Imaginas un mundo sin mujeres? La importancia del 8M
Aunque no se tiene un año en específico en que las mujeres comenzaron a realizar activaciones durante el 8M, en 1975 la Ciudad de México fue la sede para las primeras Conferencias Mundiales de la Mujer, auspiciadas por la Organización de las Naciones Unidas.
En general, la jornada de protesta del 8M busca que las mujeres sean consideradas como artífices de la historia y como participantes activas en la sociedad. Con el paso de los años se han incrementado las exigencias: igualdad en los espacios laborales, mejores salarios, ocupar cargos de poder y de toma de decisiones, así como un alto a las agresiones y feminicidios.
