El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha firmado una orden ejecutiva histórica para supervisar y controlar el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) en diversos sectores de la sociedad, subrayando la necesidad de regular esta tecnología disruptiva. En un discurso desde la Casa Blanca, Biden enfatizó la importancia de controlar la IA, calificándola como «la tecnología más trascendental» de la historia moderna. Acompañado por la vicepresidenta Kamala Harris, quien abordará la cumbre mundial de inteligencia artificial en el Reino Unido, Biden proclamó que esta acción gubernamental es la más significativa jamás tomada a nivel mundial.
En el marco de la creciente importancia de los desafíos y oportunidades globales relacionados con la IA, Biden afirmó el compromiso de Estados Unidos de liderar este progreso a nivel internacional. Destacó el interés de otros líderes mundiales en que Estados Unidos encabece el desarrollo de pautas para el control responsable de esta tecnología transformadora.
La vicepresidenta Harris respaldó esta postura, afirmando que las medidas adoptadas por el Gobierno de EE. UU. deberían servir como modelo para una acción global más amplia. Reconociendo el impacto global de la IA en las vidas y los medios de subsistencia de miles de millones de personas, Harris subrayó la necesidad de una respuesta coordinada a nivel mundial.
La orden ejecutiva establece la obligación para las empresas de notificar a la administración cualquier desarrollo de sistemas de IA que represente un riesgo grave para la seguridad nacional, la seguridad económica o la salud pública antes de poner a prueba dicho modelo. Además, los Departamentos de Energía e Interior asumirán la responsabilidad de monitorear posibles amenazas de sistemas de IA en infraestructuras críticas, así como riesgos en los campos químico, biológico, radiológico, nuclear y de ciberseguridad.
Esta iniciativa marca un hito en los esfuerzos de Estados Unidos por liderar la regulación responsable de la IA a nivel global, con el objetivo de fomentar su desarrollo y aplicación seguros y éticos en todos los sectores. En un entorno cada vez más dependiente de la tecnología, esta medida enfatiza la importancia de un enfoque proactivo y colaborativo para garantizar que la IA beneficie a la humanidad de manera sostenible y segura en el futuro.
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