Este miércoles, los precios del petróleo registraron un aumento sustancial, alcanzando niveles máximos en dos semanas, motivados por las amenazas del ministro iraní de Relaciones Exteriores, Hossein Amir-Abdollahian, de imponer un embargo petrolero sobre Israel, país que se encuentra en conflicto con el movimiento islamista palestino Hamás. Además, la disminución más pronunciada de lo esperado en las reservas comerciales de petróleo en Estados Unidos también contribuyó a este incremento.
Según los últimos reportes, el Brent aumentó 1.60 dólares, llegando a 91.50 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) subió 1.66 dólares, situándose en 88.32 dólares por barril. A principios de la sesión, ambos referentes mostraron un ascenso de más de 3 dólares.
En el contexto regional, la mezcla mexicana de exportación también se elevó a 84.11 dólares por barril, representando un incremento de 1.64 dólares, de acuerdo con los datos publicados por Petróleos Mexicanos (Pemex).
El llamado de Irán a los países de mayoría musulmana para boicotear a Israel, sumado al temor de un posible conflicto más amplio que afecte los suministros de crudo, ha generado una considerable inquietud en los mercados internacionales del petróleo, según Andy Lipow, de Lipow Oil Associates.
A pesar de la preocupación generada, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no tiene planeado tomar medidas inmediatas en respuesta a la llamada de Irán, según confirmaron cuatro fuentes del grupo productor a Reuters.
Además, el informe de la Agencia estadounidense de Información sobre Energía (EIA) reveló una caída considerable en las reservas comerciales de petróleo en Estados Unidos, que disminuyeron en 4.5 millones de barriles durante la semana que terminó el 13 de octubre. Este descenso se atribuye a un aumento del 72 por ciento en las exportaciones y a una reducción del 6 por ciento en las importaciones. Asimismo, las ventas de productos refinados en Estados Unidos experimentaron un notable incremento del 11 por ciento en la medición semanal, alcanzando su punto más alto en 20 meses. Por otro lado, los inventarios de gasolina también mostraron un descenso de 2.4 millones de barriles, superando las expectativas de los analistas que esperaban una reducción mínima de cien mil barriles.
La combinación de estos factores ha generado una marcada volatilidad en los precios del petróleo a nivel internacional, planteando preocupaciones sobre posibles repercusiones económicas y geopolíticas en el corto plazo.
Por: Ingrid Castillo
