En su número 100, la icónica revista tiene a la cantante en la portada, así como una extensa entrevista que muestra el por qué fue elegida
«Desde que era muy pequeña, he anotado cosas que soñé para mí», dice la cantante y compositora de nacionalidad Inglesa-Albanesa Dua Lipa, después de su sesión fotográfica bajo la lente de Zhong Lin, para la portada del número 100 de la revista TIME. “Siempre he planeado con anticipación. Aunque surgen sorpresas que evalúo en el momento, siempre hay una meta a largo plazo”.
Después de que Jane Fonda se volvió viral por ser la portada del número anterior, toca turno a Dua Lipa, a quien la revista TIME la cataloga como la persona más influyente del mundo, por sus logros en la industria de la música, la moda y el cine. En la entrevista que se le hace para este número especial, la cantante comparte detalles reveladores sobre su nueva música, su infancia en Kosovo, y su enfoque del poder de la manifestación.
En el texto se pone énfasis en que la rápida ascensión y consolidación de Lipa en la industria del entretenimiento no debería sorprender a quienes han seguido de cerca su vertiginoso ritmo en los últimos años. Con cinco canciones Top 10 en el Billboard Hot 100 y una destacada aparición en una de las películas más exitosas del año pasado, Lipa ha demostrado ser una superestrella global. Sin embargo, su impresionante producción no es obra del azar; es el resultado de «un aprovechamiento al máximo de cada minuto».
En este número de TIME se destaca que Dua Lipa, detrás de los reflectores, es el ser humano que impulsa su propio éxito y parece tener un plan meticuloso para cada aspecto de su carrera. Desde sus inicios, Lipa ha tomado cada día de 24 horas y lo ha estirado como un caramelo, analizando cuidadosamente cada paso y convirtiendo las ideas en acción. Habla de «lo que llaman éxito, pero es solo disciplina».
La influencia de Dua Lipa trasciende las fronteras de la música, resonando en la cultura popular y sirve como inspiración para una generación de artistas emergentes. Se trata de una joven con determinación, talento y visión, cuya persona va más allá de la artista pop. El equipaje cultural que tiene la cantante la ha colocado por encima de muchas de sus colegas. Lo trae de familia, es una embajadora del mundo que sabe de lo que habla, como por ejemplo de Kosovo
«Cuando la gente piensa en Kosovo, no quiero que digan: ‘Oh, Kosovo devastado por la guerra’. Hay mucho más», dice. “Mi papá y yo hacemos un festival en Pristina, cuyo objetivo es lograr que personas de todo el mundo vengan y vean lo diferente que es de lo que esperan, ya sean artistas de otros países o fanáticos que vienen para ver a los artistas que aman de los países vecinos. Cuando vivía en Kosovo, ninguno de mis artistas favoritos venía allí. Mi mayor sueño es poder llevarles eso a los niños de allí”.