Que sí, que me encanta el morbo. Que sí, que amo destruir los argumentos de los que ven conspiraciones hasta en la sopa de lentejas de su madre. ¿Usted también duda de la historia de la luna? ¿Tiene algún cuñado un poco “pesado” que le habla de como fue todo una película de Kubrick y que hay que ser muy tonto para creerse esta historia? El otro día escuché, en un podcast de un terraplanista famoso, que había que estar ciego para no ver los hilos que sostenían a los astronautas. Me generó curiosidad. Volví a ver los videos y saqué una conclusión muy parecida a la que tengo cada vez que escucho a Donald Trump; decir tonterías sin pestañear, con una total confianza en tus palabras, sí consigue generar dudas, sí convence a mucha gente.
Si te dicen (lease esto con muchísima seguridad) que hay que ser tonto para creerte la mentira de la Nasa del viaje a la Luna y que el video es tan mediocre que se ven clarísimo los hilos, pues… estoy convencido de que mucha gente los ve. Algo parecido a los milagros y apariciones de la virgen. Si todos ven, no voy a ser el único que lo niegue. Así que tenemos milagro. Hemos sido engañaos por la Nasa. Levántense y admiren los hilos. No se dejen engañar. Piensen por ustedes mismos… (como si esta gente pensara algo por si misma)
Una cuestión importante y que es el epicentro de este artículo. Toda esta manipulación conspiranoica suele venir acompañada de varios argumentos “científicos” que corroboran la imposibilidad del video y fotos de la Nasa. Pues, para eso estamos aquí. Para darle la vuelta a la moneda y aclarar algunas de las barbaridades que utilizan para convencernos de la falsedad de estas fotografías que han visto ustedes miles de veces. Empezamos:
La bandera ondea y eso es imposible ya que no hay aire: Este es al argumento número 1 que van a escuchar a los negacionistas. Efectivamente, la bandera americana puesta en la Luna parece ondular. Pero es solo un efecto óptico.
Primero, la bandera está recta (no caída hacia abajo) ya que tiene una escuadra superior a la que está sujeta. Precisamente para que no cayera sin forma.
Segundo, la bandera está arrugada y tiene y tendrá hasta el finde de los días las arrugas con las que la colocaron. No hay atmósfera por lo que cualquier arruga se mantiene por siempre. Miren la imagen y entenderán esto. Imaginen y sientan que en la Luna no hay aire, es vacío, como en el espacio. Nada se mueve. Una huella o una arruga duran la eternidad, casi literalmente. Si buscan un poco en internet van a encontrar decenas de videos explicando esto. Incluso un video donde se recreaba en vacío como se vería una bandera. ¿Como se ve? Igualito igualito que la que colocaron en la Luna. Que casualidad…
Los motores del módulo lunar no expelían llamas: ¡Normal! En el vacío no hay oxígeno. Para la combustión normal, la que genera llamas, se necesita oxígeno. Un combustible que genere “llamas” no funciona en el espacio. ¡Es obvio! (Aun así un argumento super utilizado por los negacionistas que al parecer no entienden bien el concepto de vacío y como funciona la combustión)
Las sombras de algunas fotos no son paralelas: La respuesta a esta hipótesis es bastante sencilla, la fotos a las que hacen referencia son ampliaciones o recortes de fotos panorámicas. Además, en muchos casos, se trata del mismo astronauta en dos momentos distintos.
¿Por qué no se ven las estrellas en las fotografías? Aquí se ve que los maniaticonspiranoicos no son muy aficionados a la fotografía en general. La explicación es muy sencilla. El presidente de la OSAE, a quien cito aquí, les invita a ir a un partido de fútbol nocturno y hacer una foto en la que se vean el césped y el cielo. «Tampoco van a ver las estrellas. Y no es por culpa de la atmósfera, sino porque el campo está muy iluminado. Igual que la Luna, refleja la luz, y si sacas bien la superficie, el cielo sale negro. Si sobreexpones la imagen salen las estrellas, pero el campo de fútbol o la Luna salen quemados. Y los astrónomos querían ver la superficie lunar y no las estrellas”
El módulo lunar no dejo cráter: Este argumento también usado hasta la saciedad no demuestra nada. Es cierto que el módulo pesa mies de kilos pero tengan en cuenta que la gravedad lunar es una sexta parte de la que tenemos en la Tierra y la mayoría de combustible ya estaba quemado. Esto, unido a un aterrizaje bastante suave hace que no se hiciera ningún tipo de cráter. Solo se levantó algo de polvo lunar.
¿Y por qué no hemos vuelto? Pues…por el argumento más viejo, no hay dinero. Es extraordinariamente caro ir a la luna. El impulso de la guerra fría y la lucha por ver “quien la tenía más grande” entre rusos y americanos había muerto. Los recortes llegaron a los programas espaciales que tuvieron que cambiar de estrategia y olvidar este tipo de aventuras cuando los presupuestos eran casi ilimitados. Es más importante gastar el dinero en nuevas armas que en viajar a un sitio ya alcanzado cuando no existe ya presión internacional ni nada que demostrar.
Estos son solo unos ejemplos de las principales objeciones por parte de los negacionistas a las fotos y videos de los viajes lunares. Hay más, pero créanme, igual de fáciles de rebatir que lo que acaban de leer. Simplemente no tengo espacio para poner todas las invenciones de esta gente. Cualquier argumento que escuchen ha sido rebatido de manera fácil por cientos de opiniones científicas y está accesible en segundos en internet. Así que cuando escuchen a ese cuñado pesado que le trata como tonto por creer que el hombre pisó realmente la luna, escuchen sus argumentos, relean este artículo, googleen algo que quizás no haya incluido aquí y prepárese a destrozarle. No hay argumento que no puedan rebatir con afirmaciones que puede entender un niño de 5 años. Tengan confianza. ¿Fuimos a la luna? Obviamente. Sin ninguna duda. Sí.
Por cierto, se me olvidaba. Todo lo que he escrito no sirve para nada. ¿Quieren una prueba irrefutable de nuestra presencia en la luna? Pues resulta que dejamos varios objetivos allá. Uno de ellos son reflectores (como espejos) donde llevamos más de 50 años disparando láseres y midiendo el tiempo que tarda en volver la luz. Así medimos la distancia exacta a nuestra amada luna. Literalmente, miles de científicos, laboratorios de universidades y hasta aficionados curiosos con presupuesto para un buen láser viven usando estos espejos lunares y midiendo el rebote de los rayos láseres. Señores, ¡Hay espejos en la luna! ¿Qué mas argumentos quieren?
Un abrazo enorme mis amantes de la verdad y no olviden ser felices. ¡Vayan por la sombra!