Vaya drama que se ha vivido en el tema Alexis Vega y el Club Deportivo Guadalajara. Por un lado el jugador no pretende bajar sus ingresos y por el otro el rebaño quiere recuperar algo de lo invertido, sin embargo ambas partes no quieren darse cuenta que las dos pierden cuando la intransigencia se apdera de ellas.
Alexis es un jugador con inegables cualidades, un magnífico disparo de media y larga distancia, con la rapidez mental neceasaria para ser el diferente en cualquier equipo de la liga mexicana, su único “defecto” es la disciplina; constantemente regresa con kilos de más, le gusta la vida nocturna y ha sido señalado frecuentemente por romper las reglas del club.
Del otro lado, y como si fuera pelea de box, está el Club Deportivo Guadalajara, una institución histórica, pero que ha dejado de ser ejemplar en muchos sentidos: ha sido laxo con las reglas a seguir, los futbolistas han encontrado la manera de brincarse los códigos y por si fuera poco salir avantes cuando el castigo se les aplica. Es más, tal ha sido el déficit de rigidez en el cumplimiento de las reglas, que los propios entrenadores han sentido la incomodidad de “tene que utilizar” a los futbolistas descarriados.
Todo este entorno ha convertido el caso de Alexis Vega, que se empeña en hacerse el mártir, en algo que pudiera tener varias lecturas, según se vea. El jugador está en su derecho de pelear lo que firmó y el club perdió la oportunidad de deshacerse de él cuando decidió regresarlo y pasarle sus indisciplinas por alto. Mala para las Chivas.
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La realidad es que quien fuera el “niño consentido” de la afición del rebaño, se convirtió en el enemigo público número uno y ahora con su inminente salida a Toluca podría ser el mártir de Verde Valle, cuando en realidad el jugador ha sido tan responsable o irresponsable como para ganarse cada cosa que le sucede.
Vega se irá a Toluca y todo quedará en un amargo recuerdo con las Chivas, pero también existirá el argumento de que se fue porque en Guadalajara lo querían “congelar” sin razón aparente, lo cual sabemos no es cierto, pero ante algunos así fue o así se interpretará, según convenga.
Ojalá que Vega recupere su carrera porque queda claro que si no es ahora con el Toluca, otro tren dificilmente pasará. Mientras ¡qué la pelota siga rodando!
Por: Gustavo Sánchez (@Gusharris76)
