A 43 años de la muerte del ex Beatle, un documental da nuevas pistas
Hace 43 años el mundo despertó con una impactante noticia: asesinaron a John Lennon. No existían las redes sociales ni los teléfonos celulares, pero todo el mundo lo supo. En todo el mundo había estupor. Nadie lo podía creer. A todos les dolió.
La noche del 8 de diciembre de 1980 un hombre que había estado todo el día a las afueras del edificio Dakota, ubicado frente a Central Park, en Nueva York, se acercó a John Lennon a pedirle un autógrafo y acto seguido, le disparó. Fueron cinco detonaciones.
Un crimen que hasta la fecha no tiene explicación.
Se ha estrenado una docuserie en la que, por primera vez, figuras clave de la vida y la muerte de John Lennon, entre ellos amigos, médicos e investigadores, comparten sus recuerdos personales y revelan lo que sucedió la noche de su asesinato.
Narrada por Kiefer Sutherland y sin música de John Lennon, la serie inicia donde todo terminó y abre con la pregunta ¿por qué la muerte de John Lennon se sintió tan masiva y profundamente?
Esta profunda investigación, que fue sustentada legalmente en su realización, se cuestiona por qué un crimen de esa magnitud fue un caso que nunca fue a juicio y que por tal motivo, nunca hubo una declaración pública de lo que pasó.
Donde hay incertidumbre, crecen las teorías de la conspiración, y más aún si en los expedientes del FBI consta que a John Lennon se le consideraba una amenaza política.
A más de 40 años de la muerte de uno de los genios de la música, un hombre que revolucionó, no solo a la industria, sino a la sociedad y rompió todo tipo de paradigmas, no hay respuestas y al contrario, hay más preguntas.
John Lennon vivía con su esposa Yoko Ono y su pequeño hijo Sean, en el séptimo piso del edificio Dakota, ese mismo edificio que se hizo famoso al ser el escenario de unas de las cintas más polémicas del cine y del género de terror, El bebé de Rosemary, protagonizada por Mia Farrow, en ese entonces casada con Frank Sinatra.
La docuserie llamada John Lennon, asesinato sin juicio, toma testimonio de las personas cercanas a Lennon, pero también de todos aquellos que estuvieron presentes de una u otra forma la noche del asesinato. Los dos porteros del edificio, el primer oficial de policía que llegó a la escena del crimen, un taxista que llegó a dejar a un par de pasajeros un minuto antes del hecho, los médicos. Y también a quienes estuvieron unas horas antes con él; la reportera de la RKO, sus musicos y el ingeniero del estudio de grabación.
Tres primeros episodios dirigidos por Nick Holt y Rob Cold Stream que mantienen al borde del asiento al televidente, no solo por el personaje, sino también por todo el contexto social de ese Nueva york y el mundo de inicios de una década que para el mismo John Lennon era de un cambio de manera positiva.
“La gente tiene el poder para hacer y crear la sociedad que quiere, y creo que es hora de un cambio”, fueron palabras que dio el artista en la última entrevista que dio. Un documental que muestra los hechos, pero también los sentimientos de las personas que estuvieron ahí y que hasta ahora se han atrevido a hablar. Ya en la plataforma Apple+.