
Medios británicos revelaron este miércoles la angustiosa llamada de auxilio realizada por el capitán Sumeet Sabharwal, piloto del vuelo AI171 de Air India, segundos antes de que el avión se estrellara en la ciudad de Ahmedabad, India, provocando la muerte de al menos 260 personas, entre pasajeros y civiles en tierra.
La aeronave, un Boeing 787-8 Dreamliner con destino a Londres, despegó con normalidad, pero apenas dos kilómetros después de dejar la pista, perdió potencia y terminó impactando contra un edificio en el barrio de Meghaninagar.
“Mayday… sin empuje, perdiendo potencia, incapaz de elevarse”, fue el desesperado mensaje que transmitió el capitán Sabharwal, según registros obtenidos por medios como The Times, The Telegraph y Daily Mail.
Sabharwal, con más de 8,200 horas de experiencia de vuelo, y su copiloto Clive Kundar, quien sumaba 1,100 horas, intentaron mantener el control del avión durante 17 segundos tras la pérdida de potencia, antes del brutal impacto. La aerolínea Air India confirmó que 241 de las 242 personas a bordo perdieron la vida. El único sobreviviente fue Viswashkumar Ramesh, un ciudadano británico que viajaba en el asiento 11A y que escapó milagrosamente con heridas menores. Según relató, escuchó “un ruido fuerte” instantes antes del choque.

El avión apenas había alcanzado los 120 metros de altitud cuando, según los primeros reportes, ambos motores fallaron simultáneamente, lo que desató una serie de alarmas en la cabina. Videos tomados desde tierra muestran al avión descendiendo rápidamente antes de estrellarse contra el edificio del BJ Medical College, provocando una enorme explosión y el incendio de al menos cinco inmuebles debido a las más de 90 toneladas de combustible que cargaba la aeronave.
La cola del avión sobresalía de un edificio parcialmente colapsado, mientras una de las alas quedó seccionada entre los escombros. El tren de aterrizaje se incrustó violentamente en el comedor del centro médico, donde se encontraban médicos y estudiantes en pleno almuerzo. Krishna, un médico local citado por medios de la India, aseguró haber rescatado a 15 estudiantes, aunque también reportó haber encontrado “20 cuerpos completamente quemados”.
Dos teorías en investigación
Expertos en aviación han planteado dos posibles causas para el siniestro. La primera, propuesta por el capitán Saurabh Bhatnagar, apunta a una posible colisión con una bandada de aves, una situación que se ha presentado anteriormente en esa zona y que podría haber provocado la falla de ambos motores. No obstante, la ausencia de humo y fuego en los motores antes del impacto ha generado dudas sobre esta hipótesis.
La segunda teoría, considerada más probable por especialistas como Marco Chan, de la Universidad Nueva de Buckinghamshire, y respaldada por el autor y ex piloto Terry Tozer, sugiere un error en la configuración de los flaps. Estas superficies móviles en los bordes de fuga de las alas son esenciales para generar sustentación en despegues y aterrizajes. Una falla en su despliegue podría haber impedido que el avión alcanzara la altitud necesaria tras dejar la pista.
Mientras tanto, investigadores internacionales y autoridades aeronáuticas ya analizan las cajas negras del Boeing siniestrado para esclarecer con precisión lo ocurrido. El accidente ha sacudido tanto a la industria aérea como a la opinión pública en la India y Reino Unido, generando llamados a revisar los protocolos de seguridad en despegues desde aeropuertos con alto tráfico de aves y condiciones complejas.