Un equipo de arqueólogos liderado por el renombrado egiptólogo Zahi Hawass presentó el hallazgo de tumbas de 4 mil años y arte de la reina Hatshepsut
Una serie de asombrosos hallazgos arqueológicos han sido desvelados en una antigua necrópolis egipcia en la ciudad de Luxor, arrojando luz sobre la vida en Egipto de hace más de 4 mil años. Durante una excavación en la que se ha trabajado por tres años en la región de Deir al Bahari, en la orilla occidental del Nilo, un equipo de arqueólogos liderado por el renombrado egiptólogo Zahi Hawass descubrió tumbas, arte y elementos funerarios que datan de las dinastías 15 y 18, un periodo crucial de la historia egipcia que incluye a faraones como la reina Hatshepsut y el rey Tutankamón.
Los restos fueron localizados en la necrópolis de Tebas, un sitio arqueológico clave de la antigua civilización egipcia, que guarda innumerables secretos sobre las dinastías faraónicas. Entre los descubrimientos más notables se encuentra una parte intacta de las fundaciones del templo del valle funerario de la reina Hatshepsut, así como una serie de bajorrelieves e inscripciones en colores vivos, extraordinariamente bien conservados, que decoraban el templo.
Los 1,500 bloques de piedra hallados representan tanto a la reina Hatshepsut como a su sucesor, Tutmosis III, en una serie de rituales sagrados. Hawass, quien encabezó la misión, expresó su admiración por el hallazgo, describiendo los frescos como «lo más bonito que he visto en mi vida». Este conjunto de decoraciones, según el egiptólogo, es el primero de su tipo encontrado de la dinastía 18, un logro significativo en el estudio del arte y la religión del antiguo Egipto.
Además, bajo las fundaciones del templo, el equipo de arqueólogos encontró herramientas ceremoniales marcadas con el nombre de la reina Hatshepsut, lo que subraya la importancia del sitio como lugar de culto y memoria de la faraona.
El descubrimiento también incluyó tumbas excavadas en la roca de altos funcionarios del Imperio Medio, así como una tumba perteneciente al «Supervisor del Palacio» de la reina Tetisheri, de la dinastía 17. Tetisheri, madre de Ahmose I, el faraón que lideró la expulsión de los hicsos, una invasión extranjera que controló Egipto durante casi un siglo, representa un eslabón fundamental en la restauración del poder egipcio.
El equipo también desenterró pozos funerarios con ataúdes de madera marcados con un emblema de plumas de la dinastía 17, además de descubrir tumbas infantiles acompañadas de juguetes, revelando las prácticas funerarias y el lugar que ocupaban los niños en la sociedad egipcia antigua.
Este anuncio de descubrimientos arqueológicos coincide con un momento de renovada atención hacia el patrimonio cultural de Egipto, que busca revitalizar su industria turística, un sector clave para la economía del país, que enfrenta desafíos económicos. En 2023, Egipto recibió a 15.7 millones de turistas, y el gobierno espera atraer a 18 millones este año, aprovechando la fascinación internacional por los tesoros arqueológicos de la región.