Isabel Miranda de Wallace, presidenta de la organización Alto al Secuestro, continúa bajo investigación por presunta fabricación de pruebas relacionadas con el secuestro de su hijo Hugo Alberto Wallace. La denuncia, presentada hace dos años y medio, alega que Miranda rentó un departamento a través de un prestanombres, donde supuestamente ocurrió el secuestro y homicidio de su hijo. Se afirma que sembró una gota de sangre y la licencia de conducir vencida de Hugo Alberto para simular la escena.
El abogado que presentó la denuncia respalda sus acusaciones con una veintena de pruebas, incluyendo dictámenes criminalísticos, de genética forense, representación gráfica, órdenes de cateo, testimonios e informes médicos. Familiares de las personas sentenciadas por el secuestro, así como su exabogado defensor, argumentan que funcionarias del Poder Judicial de la Federación han demorado la investigación mediante recursos judiciales.
A pesar de la gravedad de las acusaciones, una jueza y dos magistradas, junto con la Fiscalía General de la República (FGR), no han realizado ningún acto de investigación en los últimos dos años y medio. La demanda judicial también señala que Miranda simuló que el padre biológico de su hijo era otra persona para que el perfil genético coincidiera con la sangre encontrada en el departamento.
Documentos judiciales obtenidos por el medio de comunicación MILENIO, detallan distintas irregularidades, como la renta del departamento donde se habría cometido el asesinato. A pesar de la denuncia por falsedad de declaraciones judiciales y simulación de pruebas presentada en mayo de 2021, la investigación permanece estancada debido a recursos legales interpuestos.
El proceso judicial revela un entramado de recursos no resueltos que impiden confirmar o descartar la participación de Isabel Miranda en el presunto delito. La polémica persiste en torno a la demora de las autoridades en esclarecer los hechos y determinar la veracidad de las acusaciones presentadas en este caso.
Ingrid Castillo
