Valuadas en medio millón de dólares, las piezas habían sido introducidas de contrabando en Estados Unidos, donde fueron blanqueadas mediante falsificaciones de procedencia y tasaciones fraudulentas
La justicia neoyorquina anunció este viernes la restitución a México de 30 piezas patrimoniales, con un valor estimado de medio millón de dólares, que habían sido incautadas en el marco de investigaciones contra redes de saqueo y tráfico de patrimonio cultural latinoamericano.
Entre los objetos devueltos destaca un yugo para el Juego de la Pelota, una de las primeras formas de deporte en Mesoamérica, que data aproximadamente entre los años 300 y 600 d.C. Este yugo, de peso considerable, probablemente tenía un uso ceremonial o se entregaba como trofeo. Además, entre las piezas entregadas se encuentran una figura que representa a un sacerdote de Xipe Totec, el dios azteca de la agricultura y la guerra, y otra figura que simboliza a Quetzalcóatl, la serpiente emplumada, junto con una tortuga antropomorfa, elementos distintivos de la deidad creadora.
El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, destacó en un comunicado que «las piezas devueltas reflejan la profundidad y la belleza de este antiguo patrimonio cultural». También subrayó que, a pesar de esta restitución, aún existen muchas otras piezas saqueadas de México que continúan en manos privadas o en galerías y casas de subastas. «Seguiremos localizándolas con la colaboración policial», añadió Bragg.
Por su parte, el cónsul general mexicano en funciones, Joaquín Pastrana Uranga, al recibir las piezas, expresó: «Cada pieza forma parte de la historia y la identidad de México». Estos objetos, provenientes de la rica tradición mesoamericana, han sido objeto de saqueo durante todo el siglo XX y lo que va del XXI, alimentando el mercado ilícito de bienes culturales.
Las piezas habían sido introducidas de contrabando en Estados Unidos, donde fueron blanqueadas mediante falsificaciones de procedencia y tasaciones fraudulentas, según la fiscalía neoyorquina. Este esfuerzo por devolver las piezas forma parte de una estrategia más amplia para frenar el tráfico ilícito de bienes culturales y proteger el patrimonio de naciones como México, que ha sido gravemente afectado por el saqueo de sus riquezas históricas.