La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) ha desentrañado un intrigante misterio cósmico que ha dejado perplejos a los científicos durante años: la contracción de algunos exoplanetas, revelando posibles causas detrás de este fenómeno celestial. Datos recopilados mediante el telescopio espacial Kepler arrojaron luz sobre este enigma, ofreciendo nuevas perspectivas sobre la dinámica planetaria.
Los resultados de la investigación sugieren que los núcleos de estos planetas están desencadenando un peculiar proceso: están desplazando sus atmósferas desde el interior hacia el exterior. Esta notable reducción en algunos exoplanetas, particularmente aquellos con un tamaño que oscila entre 1.5 y 2 veces el de la Tierra, ha desconcertado a los astrónomos, quienes han definido una «brecha de tamaño» que ha capturado su atención.
Jessie Christiansen, líder científica del Archivo de Exoplanetas de la NASA, señaló que los datos recopilados hasta ahora han revelado que esta brecha no es aleatoria. Los científicos están convencidos de que algo inusual interfiere en la capacidad de estos planetas para alcanzar o mantener este tamaño específico. Según Christiansen, «los científicos de exoplanetas tienen ahora suficientes datos para decir que esta brecha no es una casualidad. Algo está sucediendo que impide que los planetas alcancen y/o permanezcan en este tamaño».
Una de las teorías propuestas para explicar esta fenomenología apunta a que algunos subneptunos, debido a su insuficiente masa y, por ende, a una fuerza gravitacional limitada, podrían perder sus atmósferas con el paso del tiempo. Aunque aún persiste el enigma sobre el proceso preciso mediante el cual se produce esta pérdida atmosférica, los científicos han planteado dos hipótesis principales: la pérdida de masa impulsada por el núcleo y la fotoevaporación.
Este descubrimiento desencadena un nuevo fervor en la comunidad científica, alimentando el deseo de comprender los intrincados mecanismos que gobiernan la evolución y la dinámica de los planetas más allá de nuestro sistema solar. La NASA continúa con su compromiso de explorar los confines del universo, desentrañando sus misterios más profundos a través de la incansable búsqueda de conocimiento y descubrimientos innovadores.
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