Dentro de la conmemoración del 117 aniversario de la pintora, se entregó este sábado el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo ya remodelado
Tras varios meses de remodelación y reparaciones, este sábado fue entregado el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, casa que la pintora habitó de manera intermitente, entre 1934 y 1939.
Construida por Juan O’Gorman, la casa es un icono dentro de la arquitectura moderna y un centro importante en la Ciudad de México. Los visitantes pueden admirar los famosos judas de la colección de Diego Rivera y ver los muebles y trastos que usaba, tanto él como Frida.
Esta casa doble, a la que en un tiempo se le conoció como Casas Gemelas, tiene un espacio para cada uno de los pintores y se conectan por un puente. Ya sea que Frida fuera a ver a Diego o viceversa, el antecedente de una forma de matrimonio moderno, cada uno en su espacio.
Edificado conforme al estilo funcionalista, concepto arquitectónico por el que el conjunto habitacional fue declarado monumento artístico el 25 de marzo de 1998, las casas fueron habitadas por Diego y Frida a principios de 1934. Frida la habita hasta 1941 cuando muere su padre y se cambia a la casona de Coyoacán y Diego permanece hasta el año 1957 fecha de su muerte.
A través del Programa Nacional de Reconstrucción, la edificación fue totalmente renovada con importantes obras de mantenimiento y conservación, y a partir de este sábado fue abierta al público con la inauguración de la exposición «Kahlo sin fronteras».
Este sábado, la entrega de la casa se hizo oficial y se contó con la participación de la directora del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, la maestra Lucina Jiménez, quien dijo que «la inversión en patrimonio, es inversión en vida, es inversión en presente y en futuro, y por eso estamos aquí celebrando que esta casa, que en su momento fue donada al pueblo de México por Ruth Rivera, quien la heredó de Diego, se haya convertido en parte de ese patrimonio, y aquí está labrada también la biografía artística de una Frida que hoy, gracias a Cristina Kahlo y a Javier Vázquez vamos a poder tener la posibilidad de recorrer”.
También estuvo presente Cristina Kahlo, sobrina de la pintora, quien agradeció a la titular del INBAL por hacer posible esta exposición y contó cuando consultó y fotografió los expedientes médicos de Frida Kahlo que se conservan en microfilm en el archivo del Centro Médico ABC. “Llegar a ellos no fue fácil”, dijo, pues primero demostró su vínculo familiar con Frida. Al final, después de un mes de búsqueda, se encontró la carpeta a nombre de Kahlo de Rivera. Para finalizar, agradeció a nombre de Frida Kahlo, a todos aquellos médicos y enfermeras que ella misma mencionó en su diario “y que fueron su soporte en momentos difíciles de la vida”.
Impresos como negativos y colocados sobre pantallas de luz, como si fueran radiografías, los documentos dan cuenta de las intervenciones médicas realizadas, entre 1952 y 1953, a la ocupante del cuarto 21 de la antigua sede del Centro Médico ABC: la pintora Frida Kahlo, y son parte de la muestra, así como una serie de fotografías que Graciela Iturbide.
En esta casa que fue diseñada y construida por Juan O’Gorman, quien este 6 de julio cumpliría 119 años de su natalicio, fue el Arq. Arturo Balandrano, director general de Sitios y Monumentos, en representación de Alejandra Frausto, titular de la Secretaría de Cultura, recordó la importancia de haber realizado las obras de conservación en este espacio museístico como parte del patrimonio cultural con el que cuenta el país.