Ciudad de México – La Secretaría de Salud de la Ciudad de México ha confirmado que el número de fallecidos por la explosión de una pipa de gas en Iztapalapa, ocurrida el 10 de septiembre, ha aumentado a 20 personas. La nueva víctima fue identificada como Eduardo Romero Armas, de 30 años, quien murió en el Hospital «Dr. Victoriano de la Fuente Narváez».
El más reciente informe de las autoridades capitalinas, con corte a las 10:00 h de este miércoles, indica que 31 personas siguen hospitalizadas en diversos nosocomios y que 33 ya fueron dadas de alta.
El peritaje inicial de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ CDMX) concluyó que el accidente fue provocado por el exceso de velocidad y la falta de pericia del conductor, Fernando Soto Munguía, quien falleció el martes 16 de septiembre. El análisis técnico determinó que Soto Munguía conducía a unos 50 km/h en una zona donde el límite de velocidad es de 40 km/h y que perdió el control de la pipa en una glorieta. El informe de la fiscalía descarta que las condiciones del pavimento o la presencia de obstáculos en la vía hayan contribuido al siniestro.